Los vendedores del mercadillo, «contentos por volver a trabajar pero esperando que haya medidas menos restrictivas»

Daniel Martínez, comerciante conquense de textil, afirma que la 'reapertura' tras más de un mes sin poder instalar los puestos en la capital conquense "ha ido bien pero ha faltado mucha gente . Ya era hora porque en todos lados estamos trabajando menos aquí"

Los vendedores ambulantes del mercadillo semanal han expresado su satisfacción por el retorno a la actividad tras más de un mes sin poder ‘plantar’ sus puestos en los terrenos del antiguo Serranía por las restricciones impuestas por Sanidad para frenar la expansión de la COVID-19 en la capital conquense. Desde el martes 13 de octubre no se han vuelto a instalar los puestos este espacio comercial provisional y al aire libre.

Daniel García, un joven conquense habitual en el mercadillo con su negocio textil, señala que «hemos estado cuatro o cinco semanas sin mercadillo, desde mediados de octubre. Ha ido bien pero ha faltado mucha gente. La gente todavía no sabía que abríamos. Para ser el primer día, estamos contentos de empezar a trabajar.  Que ya era hora porque en todos lados estamos trabajando menos aquí».

El empresario ha puesto de relieve las diferencias existentes entre unos u otros emplazamientos y considera necsario ‘relajar’ las medidas existentes en la capital conquense. «El miércoles voy a Sacedón, allí empezamos a trabajar hace quince días; el jueves tengo Villamayor y La Parrilla, donde no hemos dejado de trabajar ningún día; el viernes voy a Valdemoro en Madrid donde estamos todos los puestos con una separación de 80 centímetros entre puestos. En Cuenca lo veo excesivo. Considero que tenemos que trabajar todo el mundo porque según estamos ahora, tenemos que trabajar. Veo excesivos cuatro metros de distancia entre puestos como medida de seguridad».

«Un metro entre puestos, suficiente»

Estas mismas fuentes han hecho hincapié, asimismo, en los agravios que se establecen con otro tipo de actividades comerciales. «En cualquier centro comercial hay metro y medio o un metro entre pasillo y pasillo. No hay más. Y están cerrados mientras que aquí estamos al aire libre. Considero que con que se dejara un metro de separación entre puestos sería suficiente».

Daniel García, entiende que la lucha contra la pandemia obliga a actuar «poco a poco pero considero que, según vayan pasando las semanas, se deberían incorporar más puestos. Agradezco al alcalde que haya pensado en los comerciantes de Cuenca para estar los primeros pero también hay que pensar en los demás y que tenemos que trabajar todos, vengas de donde vengas. Lo que ocurre aquí está ocurriendo en todos sitios, Un vecino mío de Quintanar del Rey va a Villarrobledo y allí solo dejan a los de Villarrobledo, en Albacete también ocurre».