La OMS desaconseja fumigar a gran escala los espacios abiertos contra la COVID-19

La empresa asegura que las labores de desinfección urbana se realizan "garantizando la seguridad de las personas"

La Organización Mundial de la Salud (OMS) desaconseja fumigar o rociar a gran escala los espacios abiertos para combatir la COVID-19. Por su parte, la empresa concesionaria del servicio municipal de limpieza FCC ha asegurado que las labores de desinfección de espacios urbanos con hiplocorito de sodio tienen garantizada la «seguridad de las personas».

El Ayuntamiento informaba este lunes que se habían retomado la desinfección de vías públicas y entornos de edificios como hospitales, centros sanitarios, residencias de mayores y de discapacidad, y zona de La Hípica, espacio en el que se están realizando vacunaciones y test diagnósticos, ante el incremento de nuevos casos de Covid-19.

De forma inmediata, ciudadanos han alertado, a través de diversos canales, ante posibles riesgos que podía conllevar para la salud de las personas estas prácticas con el citado producto. La empresa FCC ha asegurado, a través del Consistorio conquense, que «se aplican las dosis recomendadas por los fabricantes y por el servicio de Prevención de Riesgos Laborales de la empresa de limpieza, avaladas además por documentos institucionales (informes de desinfección emitidos al inicio de la pandemia por organismos oficiales como el Ministerio de Sanidad), siempre garantizando la seguridad de las personas».

Recomendaciones de la OMS

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que «fuera de los entornos de atención sanitaria, puede utilizarse hipoclorito de sodio (lejía o cloro) a una concentración recomendada de 0,1% o 1000 ppm (1 parte de lejía de uso doméstico al 5% por cada 49 partes de agua)».

Asimismo, apunta que «no se recomienda fumigar ni rociar a gran escala los espacios abiertos, como las calles y los mercados, con el fin de destruir el virus de la COVID-19 u otros agentes patógenos. Las calles y aceras no se consideran reservorios de la infección por el virus de la COVID-19. La pulverización de desinfectantes, incluso al aire libre, puede ser nociva para la salud de las personas y causar irritación o daños en los ojos, las vías respiratorias o la piel».

Por último, indican que «también puede utilizarse alcohol con una graduación del 70% al 90% para desinfectar las superficies. Antes, es necesario limpiarlas con agua y jabón o con un detergente para quitar la suciedad. Siempre debe empezarse a limpiar por la zona menos sucia (más limpia) y acabar la zona más sucia, para no esparcir la suciedad a las zonas más limpias».