El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado que esta Semana Santa «será la última en Cuenca sin remontes». Así lo ha afirmado en el balcón del Ayuntamiento de la ciudad en su visita a la procesión del Camino del Calvario.
El líder autonómico que los remontes mecánicos hacia el Casco Antiguo supondrán «un antes y un después» en Cuenca «tanto en lo económico, como en movilidad y autoestima colectiva». «Ojalá para estas fechas del año que viene estén ya en funcionamiento, el contrato lo establece así, y se comience a notar sus efectos», ha destacado García-Page.
Son unas infraestructuras, dice, pensadas para que el turista «encuentre facilidades para subir a este Casco Histórico tan alto que tiene Cuenca».
La fecha prevista para el fin de las obras de los remontes mecánicos de acceso al Casco Antiguo están cumpliendo los plazos, según avanzó el alcalde de la ciudad, Darío Dolz, en septiembre de 2024, y se mantiene el 31 de diciembre de 2026 como fecha tope en la que tiene que estar finalizado el proyecto.
Los trabajos contemplan la instalación de seis ascensores y seis escaleras mecánicas para salvar el desnivel desde el Paseo del Huécar hasta la Plaza Mayor. Supondrá en total una inversión de más de 15,6 millones de euros con cargo a los Fondos del Plan de Recuperación, y su mantenimiento supondrá un coste anual de 100.000 euros.