El tráfico rodado por el Casco Antiguo de Cuenca podría ser «más restrictivo» una vez se pongan en marcha los remontes mecánicos. Así lo ha sugerido el alcalde de la ciudad, Darío Dolz, durante la presentación de las nuevas líneas de transporte urbano de la capital.
Una de las novedades de este servicio es que la Línea 1, que sube hacia el Casco Histórico y el barrio del Castillo, reducirá la frecuencia de 30 a quince minutos los fines de semana, puentes señalados y los meses de julio y agosto por el aumento de turistas en esas fechas.
A preguntas de los medios de comunicación sobre si esta modificación conllevará cortes de tráfico por la zona, el primer edil ha destacado que «se van a producir hechos diferenciales de cara a un futuro cercano con respecto a la movilidad por allí», haciendo referencia a los próximos remontes mecánicos que conectan la parte baja con la alta de la ciudad.
Dolz ha resaltado que la puesta en marcha de estas infraestructuras «nos dará otras capacidades, en cuanto a que sea más restrictivo el uso del vehículo privado, sin ser vecinos del Casco, para poder acceder».
Asimismo, el regidor ha informado de que el Ayuntamiento ha mantenido distintas reuniones con la Asociación de Vecinos del Casco para «ver qué sistemas adicionales vamos a implementar» para el control de coches privados.