Los diez mejores pueblos de Cuenca para formar y criar una familia

Localidades de varias comarcas conquenses exhiben sus atractivos para la residencia de padres y niños

Criar una familia en la España rural puede parecer una quimera desde la perspectiva de una gran población. Y en cierta manera puede serlo por la menor oferta educativa, comercial o sanitaria. Pero en la provincia de Cuenca hay enclaves que ofrecen sus virtudes con una base de servicios a la que se suman ventajas diferenciales. Las más evidentes están relacionadas precisa,ente con el menor tamaño demográfico, el ritmo más tranquilo o la disminución de peligros. También en el mayor contacto de la naturaleza o en una oferta menor, pero más personalizada.

Aquí, un ranking de los diez pueblos conquenses que reúnen mejor las condiciones para criar a los hijos, en un entorno propicio para el juego y la vida familiar.

Tarancón

El segundo gran núcleo de la provincia no podía faltar en el listado. Tarancón cuenta con varios colegios e institutos, con oferta tanto de Bachillerato como de Formación Porfesional. Además, dispone de un Centro de Especialidades Médicas y de una oferta de extraescolares que se extiende por la música, los idiomas y el deporte. Con casi 15.000 habitantes, combina el dinamismo de una pequeña ciudad con la tranquilidad de un pueblo grande. Actividades culturales, deportivas, parques y comunicaciones en transporte público con Madrid y Cuenca lo convierten en la opción más completa para familias que priorizan servicios.

El Pedernoso

El Pedernoso es uno los municipios más ‘kid friendly’ del territorio conquense. Su ayuntamiento fue pionero en el fomento de la natalidad con con ayudas directas de 1.000 euros por hijo (600 al mes del nacimiento, 200 al empezar Infantil y 200 al empezar Primaria). Cuenta con escuela infantil municipal, colegio, aula de conciliación durante el curso y las vacaciones escolares y diversos proyectos socioeducativos para niños y adolescentes. Tan importante es la infancia en este pueblo de La Mancha conquense, que una de sus grandes tradiciones está dedicada a ella: la pastura, en la víspera de los Reyes Magos.

Priego

Encajado entre hoces y fuentes, Priego es uno de los pueblos más pintorescos de la provincia, a camino entre la Serranía y La Alcarria. Su muy activo CRA Guadiela y su instituto IES Diego Jesús Jiménez garantiza la continuidad educativa hasta las puertas de la universidad, con Bachillerato y FP. La vida gira en torno a su patrimonio (casas solariegas, restos conventuales) y a la naturaleza que lo rodea, con numerosas opciones de educación no formal. Con centro de salud y una comunidad activa, es una apuesta segura para quienes quieren que sus hijos jueguen entre bosques y estudien sin salir del pueblo.

Carboneras de Guadazaón

Cabecera de la Serranía Baja, Carboneras cuenta con el CRA Miguel de Cervantes, el IESO Juan de Valdés y su centro de innovación educativa lo que da tranquilidad y un plus a las familias con niños y adolescentes. Sus servicios básicos, su comercio de proximidad y su ubicación estratégica entre la capital conquense y la Serranía Baja lo hacen un atractivo a pesar de la pérdida del tren. También suman sus dimensiones y el entorno natural serrano, que ofrece aire puro y espacio para el juego al aire libre.

Villar de Olalla

Un pueblo con sabor a campo… y a unos quince minutos en coche de Cuenca capital, a la que también se puede llegar en transporte público gracias a los autobuses Astra. En Villar de Olalla está la base del CRA Elena Fortún y tiene garantizada la educación de Infantil y Primaria. Lo mejor: la proximidad al hospital y a todos los servicios de la capital, lo que reduce el problema de desplazamientos para Secundaria o la atención pediátrica especializada. Ideal para quienes buscan el equilibrio perfecto entre tranquilidad rural y seguridad urbana con una dinámica oferta asociativa y una biblioteca muy activa.

Chillarón de Cuenca

Otro ‘pueblo vecino’ de la capital que además en el futuro contará con nuevas instalaciones para su colegio, que se promete como luminoso y pionero. Como en el caso de Villar de Olalla, una de sus grandes bazas es el casi acceso inmediato a los servicios de Cuenca pero sin perder las ventajas y el carácter de pueblo. Sus naturaleza cercana y la actividad cultural y deportiva creciente completan la propuesta.

Valera de Abajo

Valera de Abajo se erige como otra de las opciones más a tener en cuenta. A favor juega la oferta educativa ya que, además de colegio hay un instituto, el Duque de Alarcón, que imparte tanto ESO como Bachillerato. Pero más allá de eso la localidad es un símbolo del emprendimiento en la familia, referencia en la fabricación de puertas y con más oportunidades laborales que su entorno. La oferta creciente de recursos deportivos y una agenda cada vez más interesante dan aún más razones.

Belmonte

Patrimonio y vida cultural se dan la mano en la Mancha conquense. Belmonte no solo presume de su castillo y su atractivo turístico, también mantiene su colegio activo y una población suficiente para sostener servicios y actividades comerciales. Sus calles históricas, sus eventos medievales y su vida asociativa lo convierten en un entorno donde crecer rodeado de historia y de amigos.

Huete

La “ciudad de los conventos” sigue siendo la referencia comarcal en la Alcarria conquense. Con colegio de Infantil y Primaria e instituto (IESO Ciudad de Luna), Huete está en el grupo de localidades conquenses donde los niños pueden hacer la ESO sin salir del pueblo. Su centro de salud con punto de urgencias facilita la vida a las familias, y su vasto patrimonio histórico (iglesias, conventos, museos) ofrece un escenario cultural único. Rodeada de campo, es un lugar donde crecer significa hacerlo entre piedras centenarias y horizontes naturales.

Las Pedroñeras

Más de 6.000 habitantes y un dinamismo económico único gracias al ajo morado de fama internacional. En Las Pedroñeras hay colegio, instituto, escuela municipal de música, comercio, instalaciones deportivas y vida social. El propio tamaño del pueblo ofrece a las familias actividades, seguridad y comunidad.