El conflicto entre las dos principales empresas del sector pone contra las cuerdas al champiñón de La Manchuela

Cooperativistas iniestenses de Coicham asistirán este jueves a la manifestación convocada en Alfaro. El alcalde de Iniesta, José Luis Merino, asegura que “la repercusión económica en Iniesta, si no se alcanza el acuerdo de compra, será devastadora, pues 40 empresas de champiñón se verán obligadas a cerrar y también la planta de compost Champiniesta”

El conflicto empresarial entre Riberebro y Eurochamp ha puesto contra las cuerdas al sector del champiñón y ha dejado a los agricultores de la Manchuela en una difícil situación. El presidente de Coicham (cooperativa de agricultores de champiñón con sede en Iniesta y socia de Eurochamp), Juan Segovia, que a su vez es vicepresidente de Eurochamp, ha manifestado que “si no se soluciona el problema, hay un riesgo real del colapso del sector”.

Cabe recordar que Riberebro y Eurochamp llegaron a un acuerdo comercial en 2011 según el cual Eurochamp asumía la parte productora y transformadora de champiñón, la propia y la de Riberebro, y éste asumía la parte de comercialización y distribución, quedándose con el mercado y la cartera de clientes de Eurochamp, que exportaba dentro y fuera de Europa. Este acuerdo les convirtió en el segundo operador a nivel europeo y el tercero a nivel mundial.

Según explica Segovia, “este contrato de alianza ha estado funcionando hasta que La Caixa asumió el control de Riberebro y dejó de cumplir el acuerdo en 2018, cuando dejaron de pagarnos las facturas. Desde ese año, la cuantía que Riberebro ha dejado de pagar a Eurochamp asciende a 4,5 millones de euros”.

Por ello, Eurochamp ha convocado una manifestación para este jueves, 9 de julio, en la sede que Riberebro tiene en Alfaro (La Rioja) y a la que asistirán socios cooperativistas de Coicham: “vamos para exigir que cumplan con el acuerdo comercial que tenemos firmado, que nos paguen los retrasos y que acepten la oferta de compra”. Es necesario señalar que Eurochamp ha interpuesto una demanda contra Riberebro por valor de 26 millones de euros: “21,5 millones por incumplimiento de contrato y 4,5 por las deudas que tienen con nosotros. No queríamos llegar a los tribunales, pero después de agotar todas las vías de diálogo y viendo como nos han estado engañando, no nos han dejado más alternativa”.

Las repercusiones en la comarca de la Manchuela

Esta situación afecta de lleno a Iniesta, pero la repercusión económica se sentirá en toda la Manchuela. El alcalde de Iniesta, José Luis Merino, quien ha manifestado abiertamente su apoyo al sector del champiñón, ha declarado que “la repercusión económica en Iniesta, si no se alcanza el acuerdo de compra, será devastadora, pues 40 empresas de champiñón se verán obligadas a cerrar y también la planta de compost Champiniesta”.

Según el primer edil iniestense, esto afecta de manera directa en Iniesta a cerca de 500 trabajadores y de manera indirecta a otros 400 trabajadores: “pero repercutirá también en el resto de la economía, pues muchos recolectores y recolectoras de champiñón son inmigrantes que están asentando población en Iniesta y se marcharán donde esté la producción de champiñón, por lo que Iniesta sufrirá también despoblación ya que el sector del champiñón es el que más población fija en nuestra localidad; pero esto afectará a la economía local, pues dejarán de ir a bares, a tiendas, guardería, etc. La repercusión es grandísima tanto en Iniesta como en el resto de la Manchuela conquense y albaceteña”.

Juan Segovia ha declarado que “hay una solución buena para las dos partes, pero como Riberebro no pierde nada, está ahogando al sector del champiñón y están jugando con la vida y la economía de miles de personas, aquí y en La Rioja”.