La Fiscalía solicita 24 años de cárcel para un acusado de agredir sexualmente tres veces a la misma víctima

Los hechos, investigados por el Juzgado número 1 de San Clemente, ocurrieron durante el tiempo en el que convivieron en el mismo domicilio, desde diciembre de 2014 hasta marzo de 2015.

La Audiencia Provincial de Cuenca tiene previsto celebrar este martes, 19 de octubre, la vista oral del juicio contra un acusado de cometer tres agresiones sexuales sobre la misma víctima durante el tiempo en el que convivieron en el mismo domicilio, desde diciembre de 2014 hasta marzo de 2015. Las diligencias han sido instruidas por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de San Clemente.

El Ministerio Fiscal solicita en sus conclusiones provisionales una pena de 10 años de prisión por cada una de dos de las agresiones sexuales cometidas y cuatro años por la tercera. Asimismo, se pide la prohibición de aproximarse intencionadamente, menos de 200 metros, a su domicilio, a su lugar de trabajo o a cualquier otro frecuentado por ella y de establecer con la misma contacto escrito, verbal o visual por cualquier medio de comunicación o medio telemático o informático, durante 11 años.

El escrito del ministerio público precisa la primera agresión sexual se produjo pocas semanas después de las fechas navideñas de 2014 cuando el acusado y la víctima estaban en el domicilio del acusado, le puso una navaja en el cuello y «la obligó a mantener relaciones sexuales, llegando a penetrarla, por vía vaginal». La segunda se remonta a lo carnavales de 2015 cuando el acusado y la víctima «se encontraban en la cochera del indicado domicilio del acusado, éste golpeó en el estómago y la empujó a un sofá para mantener relaciones sexuales» consumando la penetración por vía vaginal.

La tercera agresión por la que se juzga al acusado ocurrió en marzo de 2015, cuando se metió en la habitación de la víctima, «la cogió por el cuello y del brazo, forcejeó con ella y le tocó sus partes íntimas por debajo de la ropa». La denunciante se soltó, ambos acudieron a la cocina, forcejearon y el acusado empujó a la denunciante. Minutos después, cuando ya la denunciante estaba fuera de la casa, el acusado se abalanzó y le agarró de los brazos y por pelo. Por estos hechos, sufrió lesiones que no impedían el
ejercicio de actividades habituales, ni dejaron secuelas, según el escrito de calificaciones provisionales