La vendimia de este año 2025 entra en su apogeo con el inicio de la recogida de la uva blanca airén, la variedad más autóctona y representativa en la Denominación de Origen La Mancha. En un primer balance, técnicos y viticultores señalan que la producción podría haber sufrido una sensible merma respecto al año anterior debido a los fuertes calores de principios del mes de agosto, que han podido influir en la recta final de maduración del fruto. A pesar de dicha merma, el vocal de la D.O. La Mancha ha subrayado que la calidad de la uva «no se ha resentido» ya que, asegura, se trata de una variedad «fuerte y resistente a los rigores del verano manchego».
La variedad airén tradicionalmente se vendimiaba a mano con pequeñas cuadrillas familiares, una estampa cada vez menos común, según aseguran algunos agricultores. A pesar de que este cultivo aún posee una extensión significativa de viñedo en vaso, una forma de sembrar en la que las viñas crecen libremente adquiriendo una forma redondeada más baja que está pensada para recogerse manualmente, se observa una tendencia a la mecanización.
Ahora quedan por delante varias semanas de vendimia, cuya campaña se dilatará hasta el mes de octubre. En este punto, las miradas están puestas en esta variedad airén en un contexto de revalorización, tras un cierto auge de los vinos blancos, frescos, afrutados e incluso menor graduación, acorde a las nuevas tendencias de mercado.
Con más de 80.000 hectáreas inscritas, la blanca airén es la variedad más cultivada en la Denominación de Origen La Mancha. Este año, tras el reconocimiento por parte de la Consejería de Agricultura, se espera la celebración del ‘Día Mundial del Airén’, el próximo 30 de noviembre, cuando el mosto ya sea vino y las bodegas manchegas comiencen su promoción comercial de sus vinos en Navidad.
