La Diputación de Cuenca ha firmado esta mañana el documento de adhesión al Plan de Empleo puesto en marcha por la Consejería de Economía, Empresas y Empleo de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha que recoge para la provincia la generación de casi 1.000 puestos de trabajo y un inversión total de 7,7 millones de euros, de los que la institución provincial aporta 1,9 millones de euros y el resto corresponde al Gobierno regional.
El presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana, ha estado hoy rubricando este documento en el Palacio de Fuensalida junto al presidente de la Junta, Emiliano García-Page, los presidentes de las otras diputaciones y la presidenta de la FEMP en Castilla-La Mancha, Tita García Élez; durante su intervención en este acto ha agradecido la ambición de este Plan de Empleo que hace un esfuerzo inversor y duplica las cifras de la última edición algo que viene “como agua de mayo” para los ayuntamientos pero, sobre todo, para las personas que peor lo están pasando, ya que “casi 1.000 familias se van a ver beneficiadas por estos recursos”.
Desde la Diputación de Cuenca han valorado la foto que se ha producido esta mañana en Toledo porque, a juicio de Martínez Chana, demuestra “la estabilidad política que hay en Castilla-La Mancha y que no es muy fácil de conseguir hoy en día”. Además, el presidente provincial ha agradecido a la consejera, Patricia Franco, que haya trabajado para crear “un plan vivo y flexible” que se adapte a las necesidades de los pueblos de menos de 500 habitantes que “son 183 en la provincia, es decir, más del 75 por ciento de los municipios”, ya que estos ayuntamientos tendrán la posibilidad de elegir la modalidad de contratación desde un punto de vista temporal.
El máximo dirigente provincial ha reiterado el compromiso de su equipo de Gobierno con estas políticas activas “desde el primer momento”, un Plan de Empleo que hoy nadie duda de que es completamente necesario, a pesar de que “en otras épocas se determinó su supresión” por unas personas que ahora son quienes precisamente exigen ponerlo en marcha.