El primer balance semestral de siniestralidad en las carreteras de Castilla-La Mancha para este 2025 sitúa a la provincia de Cuenca como una en la que menos accidentes graves se han registrado, aunque se encuentra en las primeras posiciones en lo que a mortalidad en las carreteras se refiere.
Entre enero y junio de 2025, el Servicio de Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha coordinó la intervención en 17 accidentes de tráfico graves en la provincia de Cuenca, lo que la sitúa como la cuarta provincia de la región en número de siniestros, solo por delante de Guadalajara, que registró 13. Por su parte, Toledo se posiciona como la provincia con mayor número de accidentes con 50 siniestros, lo que supone que en este territorio se han concentrado el 42% de los incidentes de la región.
En cuanto al número de fallecidos en esos accidentes, a pesar de que el número de sucesos graves en viales no alcanza la veintena en la provincia de Cuenca, la mortalidad asciende hasta ocho personas, lo que convierte a Cuenca en la segunda provincia con mayor número de víctimas mortales en la primera mitad del año, solo por detrás de Toledo, con 17 fallecidos en 50 accidentes. Por su parte, Albacete y Ciudad Real registraron tres muertes cada una y Guadalajara, dos.
En el conjunto de Castilla-La Mancha, durante los primeros seis meses de 2025 se produjeron 118 accidentes de tráfico graves, en los que murieron 33 personas, una cifra inferior a la del mismo periodo de 2024, cuando hubo 43 fallecidos en 120 siniestros. Analizando los datos por meses, destaca la baja cifra tanto de siniestralidad como de mortalidad producida durante el mes de marzo, cuando se produjeron 15 accidentes de tráfico graves con una sola víctima mortal en toda la región.
En el lado opuesto se sitúa el mes de junio, con ocho personas fallecidas en 25 siniestros viales en toda Castilla-La Mancha. Los meses de enero y mayo reflejan la misma cifra de accidentes pero un dato muy distinto en cuanto a los fallecimientos Así, si en ambos periodos se produjeron 21 accidentes de tráfico. En el mes de enero fallecieron dos personas, frente a las nueve que perdieron la vida en mayo. En el caso del mes de abril, las víctimas mortales fueron cinco y se produjeron en los 22 accidentes de tráfico. Finalmente, en febrero murieron un total de ocho personas en los 14 accidentes acontecidos ese mes en las carreteras castellanomanchegas.
Desde enero hasta junio se han coordinado de media mensual en la región unos 20 accidentes de tráfico graves. Un 40% del total de los accidentes registrados (48 siniestros) se han producido por la salida de vía del vehículo, sin que interviniese ningún otro coche como causante del siniestro, tal y como viene sucediendo en periodos anteriores. Estos datos suponen que cuatro de cada diez accidentes de tráfico graves han sido consecuencia de una salida de vía. Los datos dados a conocer por la Dirección General de Tráfico indican que la distracción, el exceso de velocidad y el consumo de alcohol y drogas están detrás del resto de este tipo de siniestros.