El Gobierno de Castilla-La Mancha ha invertido 45.124 euros a través de la Agencia del Agua en la mejora de la red de abastecimiento de agua potable en Boniches. El total de esta actuación, que e está ejecutando en colaboración con el Ayuntamiento del municipio, alcanza una inversión total de 68.250 euros. En estos trabajos se renovará más de un kilómetro de tubería, se mejorará la detección de fugas y se reducirá el consumo energético mediante la instalación de sistemas solares fotovoltaicos. La obra, que cuenta con un plazo de ejecución de tres meses, ya se ha iniciado.
El delegado provincial de Desarrollo Sostenible, José Ignacio Benito, ha visitado los trabajos junto al alcalde del municipio, José Abril Palomares, técnicos de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha y responsables de la empresa adjudicataria de la obra. Benito ha recordado que Boniches forma parte de los 24 municipios beneficiarios de la convocatoria de ayudas lanzada por el Gobierno de Castilla-La Mancha para proyectos de mejora del abastecimiento y reducción de pérdidas en redes de agua potable en localidades menores de 20.000 habitantes, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
En este sentido, el responsable de Desarrollo Sostenible en Cuenca ha referido que «el Ayuntamiento de Boniches, como tantos otros municipios de la provincia, no podría afrontar en solitario una inversión de este tipo para garantizar un suministro de agua de calidad y una gestión más eficiente de los recursos hídricos», así ha destacado la colaboración entre instituciones como una pieza «fundamental para asegurar servicios básicos de calidad y un futuro sostenible para nuestros pueblos», ha asegurado el delegado provincial.
El proyecto contempla la sustitución de 1.310 metros de tubería en un tramo que conecta la salida del municipio con uno de los depósitos principales, así como la instalación de tres ventosas en los puntos altos para evitar problemas de presión. Además, se colocarán contadores de impulsos en la salida de ambos depósitos con el fin de controlar el consumo y detectar posibles fugas, mejorando así la eficiencia del sistema. En paralelo, se instalarán dos sistemas solares fotovoltaicos que suministrarán energía tanto al clorador como a los contadores de impulsos, lo que permitirá reducir el coste energético.
