Así salvaron la vida dos agentes del Seprona al cazador accidentado en Paredes

    La asociación lamenta "la carencia de formación y medios" en la Guardia Civil y asevera que "gracias a los conocimientos de primeros auxilios de los miembros del Seprona y a que llevaban un botiquín, los agentes procedieron a estabilizarle hasta la llegada de los servicios médicos"

    La Asociación Española de la Guardia Civil (AEGC) ha emitido un comunicado en el que felicita a los dos agentes del Seprona de Cuenca que el pasado sábado socorrieron a un cazador accidentado en Paredes. Además, han recalcado «la importancia de la formación y la dotación de un buen botiquín para salvar vidas».

    La asociación ha subrayado «la importancia de la formación de los agentes en primeros auxilios y la dotación de botiquines, al menos uno por patrulla», indicando que el accidente ocurrido en el coto San Roque de Paredes es «un ejemplo de la importancia de la reclamación».

    Apuntan que «al llegar lo agentes comprobaron la gravedad de la lesión, tenía destrozada la zona por el impacto de un proyectil, estaba perdiendo mucha sangre y ya presentaba síntomas de hipotermia. Gracias a los conocimientos de primeros auxilios de los miembros del Seprona y a que llevaban un botiquín, los agentes procedieron a estabilizarle hasta la llegada de los servicios médicos: hicieron un torniquete que cortó la grave hemorragia que tenía y que le salvó la vida, le taparon con una manta térmica y fueron comprobando sus constantes para evitar que perdiera el conocimiento. Una actuación que, como los propios sanitarios dijeron, le había salvado la vida herido».

    «Hasta aquí el relato de los hechos que podrían hacer creer que son una actuación normal de la Guardia Civil. Pero nada más lejos de la realidad. Al ciudadano se le practicó un correcto torniquete porque los agentes habían hecho el esfuerzo de pagar y asistir a un curso de primeros auxilios, esfuerzo que completaron comprando con su sueldo un completo botiquín que siempre los acompaña», asevera AEGC en su comunicado.

    Así, apuntan a «la carencia de formación y medios en la Guardia Civil, dos cosas que la Asociación Española de Guardias Civiles reclama tanto en el Consejo de la Guardia Civil como, de forma más directa, en cada reunión que se tiene con los mandos. Y falta de formación que tratamos de paliar con nuestros escasos medios llevándola a cada rincón de la España Vaciada para que todos los agentes tengan acceso a ella».

    En AEGC consideran «que el ciudadano no puede quedar a expensas de que, el día que necesite ayuda, los agentes que acudan en su auxilio tengan la formación necesaria porque se la han buscado por su cuenta. Todos los guardias civiles deben tener estos conocimientos. Y por su puesto, los ciudadanos no pueden depender de que unos guardias decidan que no le compran un juguete a su hijo y que ese dinero de su sueldo lo usan para comprar un buen botiquín de primeros auxilios. El botiquín debe ser una dotación de las patrullas, como tiene que serlo una buena linterna, una buena defensa y, por su puesto, un buen chaleco antibalas personal. En la actuación se empleó material médico de intervención, torniquete marca: CAT modelo: GEN 7, tijeras de emergencia y manta térmica, la Guardia Civil dirá que no hay presupuesto para comprar todo este material, pero ha sido esta pequeña inversión la que el pasado martes salvó una vida».

    Desde AEGC han felicitado a los dos compañeros del Seprona «por su ejemplar actuación y por su compromiso con la ciudadanía, porque han llegando donde la Guardia Civil no llega dotándose de formación y medios de manera particular. Ahora solo cabe esperar a que la Benemérita tome nota y no deje sus responsabilidades en manos de los agentes o de las asociaciones para suplir las carencias formativas».