Carlos Solís Navarro, Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos. Vecino de Cuenca
Pido disculpas al lector de antemano por el diferente tono, a tiempo irónico, en otros casi pedante de la siguiente carta. Espero que al final de esta, con otra necesaria disculpa de por medio, se entienda el motivo.
La presentación de los presupuestos municipales para el ciudadano de a pie es el equivalente al Día de Reyes para un niño. Es ese momento en el que, con ojos brillantes de esperanza, uno se acerca al árbol, en este caso, el Tablón de Anuncios del Ayuntamiento, esperando encontrar por fin eso que lleva tanto tiempo deseando: bordillos rebajados, barreras eliminadas, calles reurbanizadas… ¡Qué ilusión!
Imaginen, para entender la expectación, el anhelo de un niño que lleva dos años sin recibir regalos porque los Reyes estaban a otras cosas. Yo, este año, consciente de las limitaciones monetarias, había limitado mi carta a pedir, simple y humildemente, lo que sus Majestades ya me habían anunciado en previas comunicaciones:
1. Una partida para rebajar bordillos en cruces de peatones, aprobada en el pleno de marzo de 2025.
2. Otra para estudiar la retirada de barreras arquitectónicas en Cerro Molina y Camino Cañete, aprobada en febrero de 2025.
3. Asistencia técnica para redactar el proyecto de reurbanización de la calle Carretería.
4. Y, ya puestos, la financiación para empezar a construir Carretería, con sus 450.000 euros correspondientes al periodo 2025-2026.
El día 20 de junio, puntual a la cita, acudí al Tablón de Anuncios, convertido en el árbol de Navidad presupuestario. Pero nada. Ni rastro. Ni una cinta, ni un lazo, ni un mísero envoltorio. Solo el frío silencio de un PDF que no estaba.
Tras algunas consultas, uno de los pajes reales, quizás con exceso de espíritu navideño y travesura burocrática, me indicó que los presupuestos no estaban “donde se había anunciado”, sino en una suerte de trastero virtual llamado Carpeta 3.1 Presupuestos. Se le olvidó mencionar que después había que elegir entre otras cuatro cajas misteriosas, siendo la ganadora la rotulada 3.01.02 Presupuestos Completos Vigentes del Ayuntamiento. La experiencia se tornó más cercana a la Semana de Pasión que a la mañana del 6 de enero.
Como es imposible batir el entusiasmo de un niño buscando el tesoro prometido, abrí los 15 documentos de esa caja de sorpresas. Pero la ilusión pronto se desinfló. Nada. Cero.
Ni rastro de mis peticiones. O tal vez estaban camufladas dentro de esos 15 documentos de informes y comentarios de los informes. Vuelvo a consultar con el sequito Real, pero en ese momento ya habían partido hacia Oriente, o al menos eso pareció, porque jamás respondieron.
La esperanza es lo último que se pierde. Si no tienes regalos en tu casa, siempre te habrán echado algo en casa de los abuelos. Tirando de contactos fuera del séquito real, conseguí hacerme con un documento llamado PROYECTO PRESUPUESTO 2025 AYTO – GASTOS_26-05-25 y su anejo de inversiones. Me zambullí en sus líneas con la esperanza de que allí sí que estuvieran contemplados mis deseos, aunque fuera ocultos entre partidas con nombres creativos. Pero no. Silencio presupuestario. Será que me he portado mal.
Ahora bien, quienes sí se han debido portar estupendamente son los agraciados por las partidas asociadas a los altos cargos del Ayuntamiento. En este particular ía de Reyes, ellos sí que han recibido su recompensa: un agradable aumento del 34 % en retribuciones y un 17 % en dietas. Ya sabemos que no hay Día de Reyes sin dejar un buen vino para agradecer el esfuerzo de esa noche a Reyes, pajes y camellos reales.
Lo bueno de este Día de Reyes es que, al menos, se puede alegar. El plazo por cierto, se ha extendido, posiblemente por razones similares a las que expongo arriba.
Disculpen otra vez por el tono inusual de la carta. El hastío de perseguir y rastrear los presupuestos, leer las medias verdades de las comunicaciones del Ayuntamiento, para luego no encontrar nada ilusionante en los presupuestos me empujó a este “literario”. No pretendo ofender a la Junta de Gobierno, con la analogía con los Reyes Magos.
Por cierto, mientras esperamos respuesta a las alegaciones presentadas, desde la Asociación de Vecinos de Cuenca Centro seguimos con nuestra recogida de firmas para reclamar mayor transparencia y participación ciudadana en el proyecto de Carretería. Ahora mismo contamos con más de 500 firmas digitales y hojas en la mayoría de los comercios de la calle.
Una iniciativa que, ante la vaga (o acuosa) respuesta de este Día de Reyes, cobra aún más sentido.