En un entorno de incertidumbre y retos constantes para el sector agropecuario, cada vez más ganaderos de Cuenca apuestan por un modelo que ofrece estabilidad, innovación y confianza. La integración en el Agoturia-Grupo Vall Companys, líder agroalimentario en España, se ha consolidado como una solución que permite profesionalizar las explotaciones sin perder el arraigo a la tierra.
Tres historias personales en la provincia —Marcos Pérez Molina, José Miguel Marcuello Espejo y Pedro José Lucas Panadero— reflejan cómo esta colaboración ha transformado sus granjas y su forma de vida, devolviendo seguridad y optimismo al futuro rural conquense.
Un modelo que apuesta por las personas y el territorio
Castilla-La Mancha, y en particular Cuenca, ha encontrado en el modelo de integración del Agroturia-Grupo Vall Companys una herramienta clave para revitalizar su tejido rural. La fórmula es clara: los ganaderos locales aportan su conocimiento y compromiso, mientras el grupo proporciona piensos de calidad, apoyo veterinario y técnico, acceso a formación y tecnología avanzada.
Gracias a este sistema, explotaciones familiares conquenses han logrado modernizarse, ser más sostenibles y reducir la incertidumbre de los mercados. Además, plataformas de formación como Campus Farm facilitan el relevo generacional, capacitan a los granjeros en nuevas técnicas y aseguran que cada explotación esté preparada para los desafíos del futuro.
Voces del territorio: tres historias de éxito
Marcos Pérez Molina (Salvacañete, Cuenca): estabilidad en tiempos inciertos
“Hoy trabajar por cuenta propia es casi una utopía. Con Agroturia-Grupo Vall Companys tienes la seguridad de que haces las cosas bien porque siempre te orientan y acompañan”.
Su historia como integrado comenzó en 2020, en plena pandemia. Aprovechó la oportunidad de sumarse al grupo y desde entonces destaca la tranquilidad que le aporta trabajar con un socio sólido:
“Hoy trabajar por cuenta propia es casi una utopía. Con Agroturia-Grupo Vall Companys tienes la seguridad de que haces las cosas bien porque siempre te orientan y acompañan”.
La incorporación de tecnología —como tolvas con chupete incorporado para optimizar el pienso o aplicaciones digitales para gestionar los pedidos— le ha permitido ahorrar tiempo, reducir desperdicios y ganar eficiencia en su día a día.
José Miguel Marcuello Espejo (Carboneras de Guadazaón, Cuenca): una vocación con futuro
“Formar parte de Agroturia- Vall Companys te da confianza, seguridad y perspectivas de futuro”.
Natural de Carboneras de Guadazaón, Josemi heredó la vocación ganadera de sus padres, que comenzaron en 1984 con unas pocas cerdas de cría. Con solo 19 años tomó las riendas de la explotación familiar tras el fallecimiento de su padre, integrándose con el grupo en 2007.
Hoy, tras 18 años de recorrido con Agroturia-Vall Companys, su visión es clara:
“Formar parte del Agroturia-Grupo Vall Companys te da confianza, seguridad y perspectivas de futuro. Estás siempre al día de los avances en bienestar animal, climatización y sostenibilidad”.
La integración ha supuesto para Josemi una evolución constante, permitiéndole mantener la tradición familiar mientras modernizaba sus instalaciones y aseguraba un futuro para su proyecto rural.
Pedro José Lucas Panadero (La Ventosa, Cuenca): seguridad y profesionalización
“Integrarse significa tener respaldo y la tranquilidad de no estar solo”.
Hace seis años, Pedro José decidió integrarse en Agroturia-Grupo Vall Companys para dar estabilidad a su granja en La Ventosa. Desde entonces, ha podido centrarse en lo que más disfruta: el cuidado de los animales.
“Antes todo era más incierto: la compra de pienso, la venta de animales, los precios. Ahora cuento con apoyo técnico y una planificación clara”.
La integración le ha permitido mejorar la eficiencia de su explotación, desde el suministro puntual de pienso hasta el uso de sistemas de climatización automáticos y aplicaciones de control de datos. “Integrarse significa tener respaldo y la tranquilidad de no estar solo”, asegura.
Un modelo de presente y de futuro
Las experiencias de Marcos, Josemi y Pedro José muestran cómo el modelo de integración de Agroturia-Grupo Vall Companys en Cuenca no solo asegura la viabilidad de las explotaciones, sino que también contribuye al desarrollo del territorio.
Confianza, estabilidad y modernización son las claves de una fórmula que está permitiendo a las familias ganaderas mantener viva su vocación, adaptarse a los cambios del sector y mirar al futuro con ilusión.
La integración en el Grupo Vall Companys no es únicamente una estrategia empresarial: es un compromiso real con la ganadería rural de Cuenca, con sus gentes y con un futuro sostenible para el campo.
