La multinacional alemana Mahle ha iniciado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) a 550 empleados de su sede de Motilla del Palancar, y a 190 de la que tiene en Paterna (Valencia). El proveedor de componentes para la automoción argumenta esta restructuración de empleo en “los múltiples vientos en contra a los que hace frente actualmente la industria del automóvil, incluida la ralentización de los mercados globales de la automoción, las incertidumbres arancelarias y unos volúmenes más bajos de lo esperado en la movilidad eléctrica”, han remitido a través de un comunicado de prensa.
En este contexto, la empresa continúa alegando que sus instalaciones para productos relacionados con la electrificación se encuentra “extremadamente infrautilizadas”. A la vez, la antigua Nagares ha anunciado de forma taxativa que no espera alcanzar su plena capacidad en un futuro próximo.
La multinacional ha comunicado que se encuentra en un proceso de consulta con los representantes de los trabajadores para dilucidar “soluciones justas y socialmente aceptables” para el más de medio millón de empleados afectados. “Mahle mantiene su compromiso de seguir desarrollando su negocio en España a futuro”, ha expresado en el mismo comunicado.