La Confederación de Empresarios de Cuenca, en línea con lo solicitado por las organizaciones nacionales CEOE y CEPYME, ha solicitado una política fiscal armonizada con los países del entorno De este modo, las organizaciones empresariales quieren señalar los efectos negativos de la aprobación de una una Ley sobre las tasas que prevén gravar determinados servicios digitales y transacciones financieras.
Así, en lo que respecta al impuesto digital para que grandes compañías tributen en el mercado español, consideran que este aspecto debe abordarse de forma armonizada desde la Unión Europea con el fin de que estos cambios no afecten a la competitividad de nuestro país.
De hecho, CEOE y CEPYME al formar parte de la organización empresarial europea BusinessEurope, donde ocupan una vicepresidencia, ofrecen la colaboración para que este camino de armonización se haga de la mejor manera posible.
La Confederación de Empresarios de Cuenca teme que este cambio acabe afectando a empresas españolas que ya pagan impuestos y por lo tanto pueden encontrarse en una situación de doble imposición.
En este punto, la segunda de las tasas impulsadas por el Gobierno en el último Consejo de Ministros, conocida como tasa Tobin, castiga de forma clara a las empresas españolas que operan en mercados regulados dentro de nuestro país.
Así, el temor es que estos nuevos impuestos acaben expulsando muchas inversiones hacia otros países o hacia mercados no regulados, y es por ello por lo que se reclama una armonización de los impuestos con el resto de la Unión Europea con el fin de evitar estos conflictos.
