El reloj aún no marcaba las diez de la mañana y ya se notaba un ambiente inusual en los alrededores de la ribera del Júcar, en el parque del puente de la Trinidad. Camisetas deportivas, caras expectantes y muchas ganas de correr. Pero esa mañana no se trataba de velocidad ni de marcas personales. Se trataba de sumar kilómetros con propósito en un día en el que el deporte y los fines solidarios se daban la mano en la carrera perfecta.
Con la concentración al máximo, una sonrisa en la cara y las piernas ya curtidas por más de 1.800 kilómetros recorridos, Sergio Turull no dejaba de hacerse fotos con los curiosos y los corredores que se acercaban a la carpa donde el influencer se estaba preparando. Turull comienza hoy el día 38 de su reto 50/50/50: correr 50 kilómetros durante 50 días en cada una de las 50 provincias españolas. Y todo con un objetivo que va directo al corazón, recaudar fondos para la lucha contra el cáncer infantil. El runner afirma que el reto «ya está rozando los 80.000 euros recaudados».
Esta mañana ha sido la primera vez que el influencer se ha dejado atrapar por la belleza salvaje de las hoces, en un reto que, afirma les está permitiendo recorrer «destinos increíbles» en los que nunca había estado, como es el caso de Cuenca. Una provincia que además ha conseguido un elevado nivel de participación en una jornada en la que espera que se acaben sumando «unas 200 personas», una cifra que, tal y como afirma el influencer le ha dejado «sorprendido».
Muchas han sido las personas que han decidido hacer hueco en sus agendas, entre trabajo y ocupaciones para poder formar parte del reto y correr con fines solidarios. Turull confiesa que «hay gente que ha pedido el día libre o cambiado turnos para estar aquí corriendo unos kilómetros solidarios, es emocionante”, afirma.
La llegada del deportista no ha pasado desapercibida. El corredor ha querido destacar el apoyo que han mostrado las instituciones conquenses que «se han implicado» y con las que «todo han sido facilidades», especialmente con la presencia de la Policía Local reforzando el recorrido y garantizando la seguridad de los corredores. Además la concejala de Deportes, Charo Rodríguez, no ha querido perderse la ocasión y también se ha acercado hasta el punto de encuentro para recibir a Turull y mostrar el respaldo institucional.
Además de los fines solidarios, el reto va una paso más allá de la carrera ya que Turull y su equipo han convertido cada ciudad en una oportunidad para visibilizar la causa, para generar comunidad y para invitar a la acción. Cada jornada concluye con los últimos cinco kilómetros dedicados a la parte “turística”, guiados por corredores locales que muestran lo mejor de su tierra. El influencer se muestra especialmente ilusionado por «descubrir las famosas casas colgadas» mientras corre en el recorrido que discurre principalmente por la vereda del río, una estampa perfecta para un reto que une deporte, naturaleza y compromiso social.
