San Roque, protector ante pestes y epidemias varias, ha vuelto a procesionar este sábado por las calles de Cuenca. Este cortejo del 16 de agosto es uno de los cultos más veteranos del catolicismo conquense y, aunque no tiene el cariz multitudinario de otros desfiles, sí que mantiene una fiel base de devotos que este año además se ha incrementado la caer la festividad en sábado.
La imagen ha salido a las diez de la mañana desde su sede canónica del Oratorio de San Felipe Neri para ascender por las calles Andrés de Cabrera y Alfonso VIII hasta la Plaza Mayor. Allí la comitiva ha dado la vuelta para iniciar el descenso por el mismo itinerario hasta el templo de origen, donde se ha celebrado la solmene función religiosa. Al finalizar se han repartido los panecillos, la caridad del santo.
La procesión del Glorioso San Roque ha contado con el acompañamiento musical de la Banda de Música de Cuenca (Agrupación Musical Virgen de la Luz) y con la presencia de miembros de la Corporación municipal. La representación de la Alcaldía la ha ejercido el concejal de Festejos, el socialista Alberto Castellano, y también ha acudido Álvaro Barambio, portavoz del Grupo Municipal Popular. No han faltado tampoco los cargos de la hermandad.
Virgen de la Fuensanta
Otra procesión, la de la Virgen de la Fuensanta, recorrió en la tarde de este viernes las calles del barrio de Buenavista de la ciudad. Desde la pequeña ermita del entorno de los estatutos, la imagen salió a la calle bien arropada por vecinos, que han acumulado una semana de fiestas en su honor. Charo Rodríguez, concejal de Deportes, fue la encargada de llevar el bastón municipal y estuvo acompañada de los ediles populares Álvaro Barambio y Marta Segarra. También sonó en este acto la música de la banda municipal.
