La vida de Gustavo Torner ha dado a la ciudad de Cuenca un protagonismo en cuanto al arte contemporáneo nunca imaginable en un paisaje que combina lo brusco de sus hoces con lo moderno de la imaginación creativa y abstracta. Las obras del pintor y escultor conquense, que este sábado ha fallecido a los 100 años de edad, pueden verse en el museo que él mismo creo junto a Fernando Zóbel y Gerardo Rueda en Cuenca, el Nacional de Arte Abstracto, así como en el suyo propio en la antigua iglesia de San Pablo de Cuenca, el Espacio Torner.
Pero las creaciones del artista no solo pueden verse en Cuenca y dentro de un museo, sino que están repartidas para todo el panorama nacional y mundial, desde la Biblioteca del Congreso de Washington y la Tate Gallery de Londres hasta en diferentes sitios de Madrid o Santa Cruz de Tenerife. Obras al aire libre en las que Torner dedicaba su arte al mundo.

Espacio Torner
En la iglesia tardo-gótica del antiguo convento de dominicos, en la ciudad de Cuenca, en medio de un extraordinario paisaje y junto al Parador Nacional de Turismo, hay instaladas cuarenta importantes obras de Gustavo Torner; la mitad de ellas cedidas por el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía de Madrid, depositario de unas seiscientas piezas donadas por el autor.
Museo Nacional de Arte Abstracto de Cuenca

Torner formó parte del llamado Grupo de Cuenca junto a Gerardo Rueda y Fernando Zóbel, con quienes fundó el Museo de Arte Abstracto Español en las célebres Casas Colgadas sobre la hoz del río Huécar. Gestionado por la Fundación Juan Marcha, el espacio alberga tres obras del artista conquense: las pinturas «Acero inoxidable y chatarra plateada» (1961-1962);y «Verde, negro y amarillo con circunferencia roja» (1963); y la escultura «Mundo interior» (1972).
Museo Nacional Reina Sofía
Gustavo Torner donó al pueblo español en los años 90 más de cuatrocientas obras, que se depositan en los fondos del Museo Nacional Reina Sofía en 2004, centró que en 1991 le dedicó una gran retrospectiva. Entre sus obras presentes en la Colección se encuentran: Ocre-chatarra oxidada (1961-1962); Roca o Paisaje de una roca (1957); Homenaje a Duchamp (1969); y Collage (1964). En la celebración de su centenario el pasado 13 de julio, el museo destacaba que Torner «no solo dejó una huella indeleble en la pintura, sino también en el arte público y la docencia, influyendo a generaciones y consolidando la abstracción en España».
Tate Gallery de Londres
En la Tate Modern de Londres se encuentran algunas de las obras de arte moderno y contemporáneo más fascinantes del mundo, con pinturas, esculturas e instalaciones a gran escala de artistas de todo el mundo como Pablo Picasso, Yayoi Kusama, Henri Matisse y, también, de Gustavo Torner. En concreto se puede ver la obra «Composition» (1961).
Al aire libre
Monumento Conmemorativo del I Congreso Mundial Forestal

El Monumento conmemorativo del VI Congreso Mundial Forestal (1966), más conocido como Monumento a la Madera, que se encuentra ubicado en el monte Sierra de los Barrancos, junto al río Escabas. Esta obra fue encomendada por la administración forestal al artista para conmemorar la celebración en España de dicho congreso; en aquel momento, Torner ya se dedicaba plenamente al arte al haber pedido una excedencia como funcionario. Forma parte de los puntos de la ruta por las huellas de Gustavo Torner en la Serranía de Cuenca diseñado por la Delegación Provincial de Desarrollo Sostenible en colaboración con el Espacio Torner por su centenario.
Monumento a la Constitución
Este monumento dedicado a la Carta Magna, creado por Gustavo Torner, fue inaugurado un sábado 6 de diciembre de 1986, Día de la Constitución, que en 2026 cumplirá 40 años. El periodista José Vicente Ávila cuenta en ‘El blog de Cuencávila’ cómo se vivió esa jornada, que no estuvo exenta de polémica por su ubicación al colocarse una estructura abstracta en el Casco Antiguo de la ciudad.

Torner explicaba el significado de su obra como homenaje a la Carta Magna con esta leyenda: “Estructura plural y unitaria en equilibrio por tensiones contradictorias sobre una base de gran firmeza”. El Ayuntamiento de Cuenca honró la figura del artista en su centenario con la instalación de una plaza en este monumento.
Reflexiones (1972) o Plaza de los Cubos

Es el nombre de la famosa cascada de cubos metálicos instalada desde 1972 al principio de la calle Princesa de Madrid. Se encuentra en la plaza Emilio Jiménez Millas, conocida popularmente como la de ‘los cubos’. Es una obra abstracta a base de cubos de acero que parece que caen como una cascada.
Plaza-Escultura
El Museo de Escultura al Aire Libre de La Castellano alberga una obra de Gustavo Torner con el nombre Plaza-Escultura. El artista diseñó como un conjunto unitario la pieza a exponer y el ámbito en el cual iba a estar situada, una pequeña terraza -mirador desde donde se disfruta de una bonita vista del resto del recinto.

Esta idea de abarcar con su composición toda la parcela, según explicó el artista, se le ocurrió cuando recordó el texto de Borges sobre el emperador que dice: «quiso tener un plano muy exacto del imperio y ocupó una provincia; lo quiso más exacto y ocupó el imperio entero». Así, pensó en representar una plaza con una fuente, de manera que el público no se diera cuenta de que todo era una escultura, excepto aquel que «con sensibilidad y atención mirase detenidamente».
Vidrieras en la Capilla Mayor de la Catedral de Cuenca
Gustavo Torner realizó unas vidrieras en el Altar Mayor y la nave sur de la Catedral de Cuenca, de estilo gótico, junto al vidriero Henri Dechanet. Se inauguraron oficialmente en 1995. “Recuerdo con precisión absoluta, sobre todo, la puesta en escena para la ceremonia en el palacio episcopal, que fue mi primera experiencia estética… Reconozco desde que era niño la catedral de Cuenca como fenómeno estético”, dijo el artista conquense sobre su obra.