Cañete celebró su 25 Alvarada distinguiendo a Azucena Lanza

Lanza Yuste formó parte del grupo que crearon La Alvarada, siendo el motor impulsor y destacado de las jornadas actuales.

Agrimiro Saiz Ordoño

El pasado fin de semana la villa serrana de Cañete cumplió con el tradicional homenaje a su ilustre hijo el condestable de Castilla don Álvaro de Luna. Este año convergieron dos hitos irrepetibles: se cumplían 25 ediciones de La Alvarada y, por otro lado, el ayuntamiento de Cañete y la Comisión de estas jornadas distinguían con la investidura de «Comendadora Mayor de la Villa» de este XXV Aniversario a Azucena Lanza Yuste.

Año tras año se seleccionan personas relevantes, algunas con proyección nacional e internacional, vinculadas a Cañete y su Alvarada para distinguirlos, honrarlos y agasajarles con el título de «Comendador Mayor de la Villa». Lanza Yuste formó parte del grupo que crearon La Alvarada, siendo el motor impulsor y destacado de la realidad que hoy todos conocemos.

Azucena Lanza ha dedicado gran parte de su vida a mejorar la de sus vecinos cañeteros

Con su Licenciatura en Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid empezó a trabajar en 1991 en la Diputación de Cuenca, en el Plan Cultural de Desarrollo Rural, que supuso la realización de una serie de proyectos y actividades culturales que han desarrollado procesos de animación de la vida social y cultural de Cañete y su área de influencia.

Trabajó en siete ámbitos: Cultura, Información, Educación, Formación, Turismo, Deportes y Administración y Gestión. Lo más significativo de su trabajo fue la puesta en marcha del Museo Etnológico de Valdemeca, del Museo Etnográfico de Cañete, Las Alcobas del Salín de Salinas del Manzano y el Museo del Agua Clara de Huerta del Marquesado, la Marcha Blume en Huerta del Marquesado, el proyecto del Paisaje Ilustrado en Cañete y Huerta del Marquesado, diversos concursos fotográficos, de pintura, poesía, literarios, etc. campos internacionales de trabajo para recuperación del patrimonio, actividades en Ferias como Naturama, Fitur, Sap Rural, la edición de los libros «Cañete así te vi, así te veo» y «Memorias del Mañana» de  Huerta del Marquesado dentro del programa los Legados de la Tierra, edición de folletos turísticos, planos guias, callejeros, posters, rutas senderistas homologadas, señalización turística, jornadas micológicas, gestión y tramitación de subvenciones, provinciales, nacionales y europeas, apoyo a las empresas creadas con cursos de formación específicos (guías turísticos, atención al cliente, camareros), Universidad Popular en Cañete, gestión y justificación de convocatorias y subvenciones tanto a nivel municipal así como para asociaciones y particulares que necesitaron el apoyo, cursos de informática, internet, módulos de geriatría, de gestión de asociaciones, de sastrería medieval, de educación ambiental, etc. etc.

También fue un gran logro la puesta en funcionamiento de la Biblioteca Municipal de Cañete, la web oficial del ayuntamiento así como la de Huerta del Marquesado y la, también oficial, de La Alvarada. Editó la revista «El Postigo De Cañete», desarrolló el proyecto «Te interesa» que sigue tres pasos: buscar y captar la información, tratamiento y selección y difusión de la información facilitando la información al medio rural; estos han sido algunos de sus muchos logros.

El acto de nombramiento de la Comendadora se realizó, como es costumbre, el sábado por la tarde en la desacralizada iglesia de San Julián, lo dirigió el Cronista Oficial de Cañete Miguel Romero con la maestría que lo caracteriza, presidieron la alcaldesa Montserrat Poyatos, el representante de la Diputación Provincial y Delegado Contra la Despoblación Rural Virgilio Antón, la Concejala de Cultura y miembro de la Comisión de La Alvarada Inmaculada García arropados todos por los anteriores Comendadores Agrimiro Saiz que fuera presidente fundador de CONCA, Luis Leal «Caballero Negro» de Legend, Antonio Asensio alcalde íntimamente implicado durante 18 años con La Alvarada y los recreadores históricos en un local con aforo completo de familiares, amigos, compañeros de trabajo y cañeteros deseosos de acompañar a su apreciada y querida vecina en tan entrañable acontecimiento.

Hubo palabras de reconocimiento, de recuerdos, de agradecimiento, de cariño hacia Azucena y ella respondió con un emotivo discurso recordando los inicios de La Alvarada con Miguel Romero como ideólogo de la misma que contó también con el apoyo del párroco Jesús Catalán y el alcalde Manuel Marzal creando la Comisión de La Alvarada que fue creciendo año tras año, dijo: «Esta fiesta nació con más ilusión que presupuesto, con más ganas que personal… y aquí seguimos. Porque cuando se empieza algo con corazón no hay horario ni calendario que le ponga fin.»

También recordó múltiples anécdotas como «aquel viaje a Toledo con el camión de la basura lleno de material promocional de La Alvarada al Mercado de las Tres Culturas con Emilio Escutia en su papel (de D. Álvaro de Luna) que lo bordaba» manteniéndose firme, imperturbable como en la Feria Internacional de Turismo que alguno llegó a confundirlo con una estatua.

Uno de los grandes logros conseguidos fue la declaración en 2017 de «Fiesta de Interés Turístico Regional» en la que «hubo que presentar informes, memorias, cartelería, certificados, programas de mano, apoyos institucionales, fotos, grabaciones, dossieres de prensa, papeles y más papeles.»

También se recordó cómo se fue hasta la Casa de la Moneda y Timbre para que una viñeta de La Alvarada apareciera ¡por dos veces! en los billetes de la Lotería Nacional y en los cupones de la ONCE.

Nada se le interponía a la hora de promocionar La Alvarada «y hasta cruzamos el océano unas amigas y yo y llegamos a Cañete de Chile (2003), al otro lado del mundo para hermanarnos y si había otro Cañete en el planeta, La Alvarada tenía que llegar allí también», de modo similar crearon su fiesta «Garciadas» en honor del fundador, en 1558, García Hurtado de Mendoza. En el acto el músico chileno Ignacio Pérez leyó una carta de agradecimiento del Cañete americano hacia Azucena en la que se le nombraba como «Cañetina Ilustre».

También recibió con emoción, con mucha emoción, un regalo especial de sus compañeros de trabajo de la Diputación que igualmente quisieron acompañarla en tan memorable acontecimiento.

Recordó la homenajeada algunos insalvables sinsabores «porque esta fiesta se levanta con esfuerzo, con sudor, con creatividad, con risas… y si, también con alguna que otra lágrima, porque os confieso una cosa mía: cada fiesta medieval he llorado por emoción, por nervios, por disgustos, por cansancio… porque esta fiesta no es un evento, es un trocito de mi vida «.

No obstante los años pasan y el tiempo laboral queda atrás «… me retiro con el corazón lleno, gracias por este honor, por tantos años compartidos y por seguir creyendo en esta fiesta «.

Como colofón de su discurso Azu quiso tener un recuerdo especial, amoroso «le dedico este homenaje a mi querido padre y a mi sobrino Adrián que se nos fue demasiado pronto » tras el que se fundió en un emotivo abrazo con su hermano. En la abarrotada iglesia, con el público en pié, resonaban largos aplausos a una incansable emprendedora, a la que siempre tenía una solución para un problema, la que mantenía un tono dulce ante los imprevistos, a una servidora de su pueblo, a una buena persona.