El Día de Todos los Santos se acerca como esa jornada especial de recuerdo a los seres queridos que ya no están entre nosotros. Tras ir superando etapas en la crisis sanitaria, esta edición se presenta cargada de ansiada normalidad. La visita a los cementerios se mantiene como tradición aunque también se va adaptando a los tiempos e incorporando nuevas variedades de plantas para acompañar nuestra visita.
Paula Orozco, directora de Viveros La Mezquita, destaca que «la manera de recordar a nuestros difuntos es en el Día de Todos los Santos y con flores en los cementerios. Este año parece que tenemos un día normal ya dejando atrás la pandemia porque el año pasado fue muy especial por el tema de las restricciones, confinamientos… Este año, gracias a Dios, no se presentan estos problemas. En esta ocasión, los transportes, vuelos, barcos…. están complicados desde Sudamércia, que es desde donde viene mucha flor a toda Europa, pero tenemos el mercado holandés que es muy potente y mientras haya camioneros…A pesar de todas las dificultades logísticas, el suministro de flores va a estar garantizado para el Día de Todos los Santos. Vamos a tener de todo, sin problema».
Los gustos van cambiando como cambian las generaciones que visitan a sus familiares a los camposantos. Aunque hay flores que nunca faltan se van incorporando especies nuevas. Este año, es posible ayudar a la tradición floral de La Palma llevando una especie que, como el plátano o el aguacate, forman parte fundamental de la economía de la isla. «Ya sabemos que hay flores muy típicas de estas fechas como son el gladiolo, clavel, margarita y crisantemo. Sin embargo, tenemos clientela que le gustan otras flores y se atreven con cosas no habituales. De esta forma quedan unos arreglos florales, entre comillas, no tan tristes. Con estas variedades nos salimos de las tonalidades habituales con el lililum oriental, hortensias, rosa ramificada, verónicas, astromelia, proteas…Las proteas son unas flores originarias de África, muy originales y diferentes, que son muy cultivadas en Canarias y en concreto en La Palma. En esta isla no solo se ha estropeado con el volcán la producción de plátanos sino que también se ha echado a perder una buena parte de la producción de esta planta», señala Orozco.
Flexibilidad y versatilidad en los presupuestos
La directora de La Mezquita ha dejado claro que la flexibilidad y la versatilidad son algunas de las características que marcan la relación con el cliente. «Nos adaptamos a todos los presupuestos. Aunque ha subido un poco la flor por los costes de transporte, hemos intentado no repercutir toda esa subida en el cliente sino asumir nosotros un poco. Podemos hacer presupuestos para todos los gustos. No tenemos ningún precio cerrado sino que invitamos al cliente a ver cuánto se quiere gastar y nosotros nos adaptamos».
Orozco reconoce que «seguimos aumentando la cartera de clientes para estas fechas. Sí se notan diferentes tipos de clientes según edad, gustos…Lo que ocurre también es que todo cambia. Ahora tenemos los columbarios, que cada vez hay más, y los detalles tienen que ser más pequeños. También se nota que la gente no se ciñe al Día de Todos los Santos sino que lleva su recuerdo unos días antes o después. Repartimos durante muchos los días de los pedidos. También ofrecemos servicio a distancia para otras ciudades. Tenemos clientes habituales o circunstanciales que encargan aquí para Madrid, Valencia… nuestras flores viajan bastante».
