El Equipo de Gobierno afirma, y de forma reiterada, que los autobuses urbanos no se han encontrado con ningún problema para prestar servicio en días de lluvia en la zona del barrio del Castillo y, concretamente, en la calle San Pedro. Una respuesta que niega la información remitida hace unos días por el grupo municipal popular, a través de la que también ponían de manifiesto que “algunos de los cuáles pueden encontrarse cristalizados por el tiempo que han pasado aparcado en los almacenes” y que “no son seguros” por los neumáticos en la citada arteria del barrio.
Para el Gobierno local, en palabras de su portavoz, Saray Portillo, se trata de una información desconocida y ha insistido en dejarlo como “algo puntual”. “Por sistema seguro que no, porque lo vemos subir, incluso cuando llueve”, ha sostenido.
La portavoz ha aclarado que no tienen constancia de queja o problema alguno, ni por parte de la empresa- con la que ha dicho que contactarían para dilucidarlo-, ni por los usuarios. “No se nos han trasladado nada, ni ha habido quejas en ese sentido, ni por línea verde”.
Una información que contrasta con la deslizada por los populares, que afirmaban tener conocimiento del problema a través de los afectados. “Esta situación ha sido trasladada por usuarios y conductores de los autobuses”, expresaban vía comunicado de prensa.
