La Escuela Oficial de Idiomas de Cuenca encara el inicio de un curso diferente, a la vez de complicado debido a los cambios que la Consejería de Educación ha implementado en todos los centros de la región, como el incremento de la ratio de los alumnos por aula- que se eleva a diez- y la reducción del cupo docente.
Pese a ello, en Cuenca se ha intentado hacer encaje de bolillo para seguir ofreciendo el mismo catálogo de idiomas. Así, inglés, francés, italiano, alemán y español para extranjeros continúan tanto en el centro de la capital como en el adscrito de Motilla del Palancar.
En ambas acaba de comenzar este lunes 1 de septiembre un proceso de admisión extraordinario que permanecerá abierto hasta el viernes 12 de este mes, a lo largo del cuál lo alumnos interesados pueden formalizar la preinscripción para el idioma que deseen cursar. Según el director del centro, Ramón García, de momento todos los idiomas disponen de plazas.
Finalizado el proceso de preinscripción, comenzará el lunes 18 el de matrícula, que se formalizará en la plataforma Educamos CLM.
En cuanto al inicio de las clases está previsto para el 24 de septiembre.
Cambios: de enseñanza híbrida a grupos mixtos
La exigencia por parte de Educación de elevar las ratios por aula a diez alumnos para conformar un grupo va a suponer que en los idiomas minoritarios de niveles más elevados se tengan que refundir las clases. Es decir, si en los niveles de C1 y C2 de italiano no se alcanzan esos diez alumnos respectivamente, se juntarán los alumnos de sendos niveles en un mismo aula. Coyuntura que va a suponer un gran reto para el equipo docente. “La combinación de dos niveles es lo que más preocupados nos tiene”, admite García. “Es una verdadera dificultad de cara a la enseñanza”.
Este “experimento” es la primera vez que se lleva a cabo en una escuela de idiomas. “En ninguna otra comunidad autónoma ni se hace, ni se ha hecho antes, que tengamos conocimiento”, señala el director del centro.
Otro de los cambios va a dirigido a lo que en la Consejería han denominado como “proyecto piloto”, que se traduce en un sistema de enseñanza híbrido- en la capital se va a aplicar a alemán y español- y permitirá al alumno que pueda y así lo desee, asistir a clase de forma presencial y, por su parte, a los que no pueden por problemas de distancia o de otra índole, podrán conectarse a la sesión de forma telemática al mismo tiempo que los alumnos presenciales la reciben.












