Las vallas metálicas que separan el Paseo de San Antonio de los terrenos de ADIF han cumplido ocho meses desde que se instalaron y han pasado gran parte de este tiempo por los suelos.
En este estado se encuentran esta misma semana cuando gran parte del trazado se encuentra derribada y proporcionar la utilidad para la que fueron planteadas. La Asociación de Vecinos de Casablanca ha denunciado esta situación públicamente, la última vez el pasado mes de octubre, que se ha producido de forma reiterada y ha reclamado medidas para solucionarla. El propio alcalde, Darío Dolz, reconocía recientemente el problema y reconocía ser partidario de la eliminación del vallado aunque esta decisión no corresponde en exclusiva al Ayuntamiento de Cuenca.
El colectivo vecinal ha indicado que cada vez que encuentra la valla caída avisan al Ayuntamiento y operarios municipales la vuelven a levantar. Así, una y otra vez debido a que su derribo es constante y cuya causa achacan al vandalismo, Asimismo, han reclamado la limpieza de los terrenos ferroviarios debido a la proliferación de basura y suciedad : De forma paralela, plantean la apertura del acceso al andén de la estación, situado junto al paso a nivel, debido a que era utilizado como zona de paseo por personas con discapacidad y usuarios de sillas de ruedas.
El derribo del muro del Paseo de San Antonio se llevó a cabo el pasado mes de abril en cumplimiento del Plan XCuenca y posteriormente fueron instaladas las vallas para delimitar el espacio urbano de los terrenos de ADIF. La paralización cautelar decretada por el Tribunal Supremo ha frenado el Plan XCuenca y, mientras tanto, las vallas continúan de forma precaria recordando una intervención urbana que queda pendiente.
