La Ponderosa reabre sus puertas al público con todas las garantías sanitarias y el mejor producto

La reapertura llevará asociada una novedad en las señas de identidad del establecimiento: por primera vez habrá mesas y taburetes en el interior. El local cumple este mes de marzo 48 años en funcionamiento

Ángel Millán tras la barra de La Ponderosa, Cuenca. Fotografía: Esteban de Dios.

La Ponderosa, uno de los establecimientos clásicos de la hostelería conquenses, reabre este jueves sus puertas al público tras ocho meses cerrado, en dos periodos, debido a las restricciones derivadas de la crisis sanitaria. El local ‘cumple’ 48 años en funcionamiento desde su apertura el 14 de marzo de 1973 en estas condiciones tan especiales que implicarán cambios en una de sus señas de identidad. Por primera vez, habrá mesas y taburetes en el interior.

«Aquí estamos, de nuevo, con la nueva normalidad. Con totales garantías sanitarias. No ha habido nunca mesitas ni taburetes y ahora va a haber. Va a ser una novedad importante, aunque muy limitado, habrá unas pequeñas mesas y taburetes para que aquellas personas que quepan con arreglo a las medidas puedan estar sentados». Ángel Millán reconoce sentirse con ganas «porque tengo un montón de clientela, única en el mundo y todos los días me llaman cinco mil preguntando que cuándo abro». Eso sí, asegura que contento, no. «Contento, nada. Muy enfadado porque tengo un sitio súper seguro, sano desde un punto de vista medioambiental, con filtros HEPA, extracción de aire del exterior…tengo el aire más limpio que en la calle. Dejamos una cantidad de CO2 entre 500 y 550 de pureza, eso para empezar». 

Desde un punto de vista gastronómico, la mejor noticia de la reapertura de La Ponderosa es que apuesta y mantiene «lo de siempre, afortunadamente. Los mejores percebes, las mejores gambas, el mejor jamón, el mejor chuletón, las mejores setas…todo lo mejor, lo tenemos nosotros».

Solidaridad y apoyo

Millán desea, principalmente, «pedir disculpas a todos los clientes y amigos porque la situación no ha sido la que nosotros deseábamos. También trasladamos nuestra solidaridad a todos aquellos que han perdido a sus seres queridos y nuestro deseo de una pronta recuperación a todas las personas que están contagiadas». 

El propietario de La Ponderosa precisa que la pandemia ha obligado a pasar por situaciones desconocidas. «Hemos estado cerrados, ahora cuatro meses y medio, y en la etapa anterior tres meses y medio. En total, en un año, ocho meses. Nunca en la vida, jamás, nos ha ocurrido. Y en mi caso creo que injustamente. Ha sido una barbaridad que tenga que cerrar el local porque tengo unas medidas de seguridad absolutas. Creo que no se ha gestionado bien porque tenía que haber sido establecimiento por establecimiento. El que cumpla las normas, que abra; y el que no cumpla las normas, que no abra.