El aumento de casos vinculados a la cepa británica y el previsible incremento de ingresos tras la Semana Santa ha incrementado el nivel de alerta preventiva en el Área de Salud de Cuenca.
Isabel Zafra, presidenta de la Junta de Personal de la Gerencia del Área Integrada (GAI) de Cuenca, han indicado que en la última reunión mantenida «ya nos comentaron que se estaban empezando a ver cepas británicas que eran las que hasta ahora no se había visto. Con lo cual, el nivel preventivo de alerta por parte de urgencias es alto porque esperamos que después de Semana Santa puedan llegar muchos más. Como hace un mes, nos comentaron que se estaban empezando a detectar casos de cepa británica pero no tenemos cifras concretas. Lo que nos dijeron es que hasta entonces no había habido pero estaban empezando a debutar».
Estas mismas fuentes han precisado que, de momento, «no hay presión asistencial específica con el COVID. Eso sí, las cifras van aumentando todos los días. Sí sabemos que se están ingresando en la 4ª B y eso está haciendo que no tengan que ingresar en UCI. Por eso no tenemos pacientes en UCI porque los cuidados críticos, que son con respiración no invasiva, se están llevando a la 4ª B. También estamos viendo que la edad es inferior a lo que venía antes».
Por otro lado, Zafra ha señalado que según las últimas cifras correspondientes al pasado martes, 6 de abril, hay 19 profesionales aislados en el Área de Salud de Cuenca. En su mayor parte enfermeras (7) seguidas de médicos (6).La mayor 7 enfermeras, 6 médicos y 2 celadores. «Damos por hecho que está funcionando bien la vacuna porque está todo el personal vacunado y las cifas de aislados son inferiores a las que había en las primeras olas».
Por último, la presidenta de la Junta de Personal ha resaltado que «aunque la gente está vacunada hay que mantener todas las medidas de precaución en cuanto a mascarilla, distancia social, higiene… porque la vacuna no evita que lo puedas contagiar a otras personas. No hay que bajar la guardia».