La memoria del Plan de Ordenación Municipal de Cuenca proyecta tres ejes de revitalización urbana para la capital conquense, que divide en tres bulevares o corredores: uno cultural, otro comercial y por último uno verde-deportivo.
En el estudio, realizado por Ezquiaga Arquitectura, Sociedad y Territorio SL, se indica que estos tres corredores se suman al Plan Estratégico de Regeneración Urbana de la zona Centro dentro de una actuación estratégica que tiene por objetivo potenciar el tejido urbano existente.
Según indica en su texto, «las perspectivas de evolución de la población y de la actividad son determinantes a la hora de establecer los criterios de ordenación del suelo para crecimiento residencial y de actividades económicas. El posicionamiento del presente avance del POM ante el contexto actual implica una estrategia de potenciación del tejido urbano ya existente y de crecimiento selectivo y limitado atendiendo a los condicionantes del planeamiento de ejecución».
Bulevar cultural
El bulevar cultural discurre por el eje longitudinal que va desde la plaza de toros hacia la calle de las Torres y enlaza diversos contenedores con usos actuales o potenciales ligados a la cultura, así como el valle del Huécar y la fachada histórica de las Casas Colgadas.
Los contenedores culturales que cita en este eje son: la Escuela de Música y Danza, el Centro Joven, los Multicines Cuenca, las cocheras municipales, la Plaza de Toros, los almacenes municipales, el parque y el colegio público de Santa Ana, la estación de tren convencional, la Plaza de la Hispanidad, la Diputación Provincial, el parque de San Julián, el Edificio Iberia, el Centro Cultural Aguirre, los edificios de Liberbank y los sindicatos, el colegio público Ramón y Cajal, el Teatro Auditorio de Cuenca y el Museo de Arte Abstracto.
En el Plan de Ordenación Municipal se recuerda que “el significativo legado cultural de Cuenca ejerce como motor turístico y económico de la ciudad”, pero lamenta que “la población local vive por lo general desapegada de esta valiosa herencia, accediendo a ella de manera poco frecuente. Se ha perdido por tanto su potencial educativo, creativo y transformado de la ciudad de épocas anteriores donde el interés era mayor por parte de la población”.
Es por ello que se torna “fundamental” el “volver a adherir sociedad y patrimonio a través de un nuevo recorrido atractivo, reconocible y accesible, uniendo a lo largo de este los principales equipamientos culturales de la ciudad”. Una transformación que “debe ir acompañada con un plan de gestión cultural integral que explote las nuevas potencialidades, como la creación de nuevos centros de formación, y promueva las iniciativas particulares tanto a nivel artístico como creativo/empresarial”.
Así, subraya que “un plan cultural para Cuenca, ya sea auspiciado por una efeméride, capitalidad o cualquier otro evento excepcional, no puede llevarse a cabo sin un plan de ciudad predecesor. Dichos eventos deben ser solo maneras de financiación y patrocinio para llevar a cabo un planeamiento consensuado con anterioridad”.
El Plan de Ordenación Municipal subraya en este punto “la construcción de un tejido productivo relacionado con la creatividad conllevaría la creación de empleos cualificados adaptados a la nueva realidad laboral, demandante de empresas sostenibles, resilientes y con capacidad de abarcar un amplio abanico sin una única especialización”. Para ello, resulta “vital” la disponibilidad “de lugares singulares tanto para la creación de pequeños negocios como para el intercambio y colaboración entre los centros de formación y el sector privado”.

Bulevar comercial
El bulevar comercial está situado en el eje que forman las calles Carretería y Hermanos Becerril, y está “apoyado sobre su centralidad, buscando su cualificación y su difusión hacia otras calles cercanas como la de Colón”.
Define el POM que “actualmente presenta una imagen poco unitarial, con un tratamiento tanto en planta como en sección heterogéneo y sin ningún nexo común. En este contexto los edificios de singular interés característicos del Modernismo en la ciudad baja pierden su valor en el paisaje urbano. El centro no se hace reconocible y único entre otras ciudades a la vista tanto de los habitantes de la ciudad como de sus visitantes”.

Corredor verde-deportivo
El tercero de los corredores propuestos en el POM sería el verde-deportivo que forman el río y el parque agrario. En este punto resalta que “Cuenca se ha desarrollado en las últimas décadas entorno al río Júcar, en ocasiones con una interacción clara con su ribera, como en el caso del complejo deportivo de el Sargal y su entorno. Sin embargo, la línea seguida en general ha sido la del distanciamiento y una marcada separación física de este, donde los accesos al mismo son escasos y poco marcados”.
Considera el documento que “la potencialidad de la ribera del Júcar como nodo lúdico-deportivo de la ciudad, al disponer en su entorno inmediato de cuatro complejos deportivos, cuatro parques urbanos, el recreo peral, una playa artificial, el recinto ferial junto al bosque de acero entre otros equipamientos; hace que una simple operación de accesibilidad y conexión de la ciudad con el río sea suficiente para crear un bulevar vertebrador con zonas más urbanas e integradas”.
Eso sí, destaca que la conexión “no sólo es interna en la ciudad, sino que debe servir como acceso natural a la hoz del Júcar en la parte norte y su ribera en el sur. Este nuevo bulevar debe tener la capacidad de resolver las operaciones urbanas inacabadas como por ejemplo la urbanización de las Huertas de la Alameda y la actual zona de aparcamiento entre la calle Antonio Maura, integrándola dentro del nuevo corredor verde”.
Este nuevo corredor “ha de propiciar una conexión efectiva entre las hoces del Júcar y el Huécar y el valle del Moscas, reforzando la calidad ambiental y paisajística del entorno urbano y ayudando a la conservación y revitalización de la ciudad histórica como ámbito inscrito en la lista del Patrimonio Mundial de UNESCO”.
Así, resalta que la “adecuada integración del medio natural y puesta en valor de puntos panorámicos y elementos naturales de interés pasa por una correcta señalización de los mismos”; y afirma que “se debe priorizar la rehabilitación medioambiental de zonas deterioradas que tienen potencial paisajístico o interés para usos recreativos”. En este punto indica que “de manera global se pretende establecer un control de la erosión y pérdida de suelo”, para lo que propone recuperar ciertos solares como zonas verdes y paisajes naturales en estado de abandono.
