El Hospital Recoletas Salud de Cuenca incorpora a una anestesióloga especialista en tratamiento del dolor

La doctora Elisa Belinchón señala que “el dolor crónico no debería asumirse nunca como parte de la vida”

La Dra. Elisa Belinchón, anestesióloga y con una sólida trayectoria en el tratamiento del dolor complejo mediante técnicas intervencionistas, seguras y mínimamente invasivas, es quien dirige a partir de ahora la Unidad del Dolor del hospital Recoletas Salud de Cuenca, un servicio desde el que procurar soluciones eficaces a quienes sufren dolor persistente y buscan alternativas más allá de la medicación convencional.

Para la Dra. Belinchón, el dolor crónico no debería asumirse nunca como parte de la vida. “En esta unidad escuchamos a cada paciente, valoramos su caso y aplicamos un tratamiento individualizado para que pueda volver a vivir con plenitud”, señaló la nueva responsable.

La Unidad del Dolor está especialmente diseñada para tratar casos como:  dolor lumbar; ciática, estenosis de canal, síndrome facetario; dolor cervical, cefaleas crónicas, migrañas resistentes; neuralgias como la del trigémino u occipital; rizartrosis, artrosis y otras formas de dolor articular; dolor por lesiones deportivas crónicas o mal curadas; dolor oncológico o dolor postquirúrgico persistente y síndrome de dolor regional complejo y fibromialgia.

La Dra. Belinchón destacó que el hospital Recoletas Salud de Cuenca realiza tratamientos modernos y personalizados, en régimen ambulatorio. Se realizan técnicas avanzadas con un enfoque multidisciplinar, utilizando procedimientos mínimamente invasivos que permiten al paciente continuar con su vida diaria sin ingreso hospitalario.

Entre esas técnicas, la doctora destacó los bloqueos nerviosos, radiofrecuencia pulsada y térmica, neuromodulación periféric, infiltraciones con plasma rico en plaquetas (PRP), infiltraciones con ácido hialurónico y tratamientos específicos para neuralgia facial, cefaleas y dolor miofascial.

“Un servicio de referencia en el tratamiento del dolor, sin tener que esperar, ni desplazarse a otras ciudades con una atención directa, humana y accesible, pensada para quienes llevan demasiado tiempo conviviendo con el dolor”, concluyó señalando la especialista.