Dolz sobre la ORA en el estado de alarma: «A lo mejor hay que dirigirse a la empresa y no al Ayuntamiento»

El primer edil defiende la gestión del Consistorio: "Hay Ayuntamientos que ahora se dirigen a nosotros preguntando cómo lo hicimos porque lo interrumpieron de forma unilateral y ahora se encuentran con problemas económicos de cara a la empresa".

El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha defendido de nuevo la actuación del Ayuntamiento de Cuenca ante la prestación dels erviciod e ORA durante el confinamiento tras la organización de un movimiento ciudadano que plantea la devolución del importe de las multas impuestas durante el estado de alarma.

El primer edil ha asegurado que «si la empresa decidió en su día, de forma unilateral, la cercenación en la prestación de ese servicio sin tener el refrendo del Ayuntamiento… a lo mejor hay que dirigirse a la empresa y no al Ayuntamiento de Cuenca aunque las cartas sancionadoras vengan con el membrete del Ayuntamiento de Cuenca, como no puede ser de otra manera. En el momento que se paralizó la prestación del servicio fue comunicado por el Ayuntamiento de Cuenca, con unos días de antelación a la paralización para que todo el mundo lo supiera».

El primer edil ha asegurado que «cuando el Ayuntamiento tomó la decisión de la paralización de a prestación del servicio de la ORA fue de la mano de la empresa. En todo lo que hubo antes, previo a esa decisión, no tuvo nada que ver el Ayuntamiento de Cuenca. En ningún caso. Es más, hay Ayuntamientos que ahora se dirigen a nosotros preguntando cómo lo hicimos porque lo interrumpieron de forma unilateral, el propio Ayuntamiento, y ahora se encuentran con problemas económicos de cara a la empresa». 

Estas mismas fuentes han indicado que «si no recuerdo mal fue una demora, entre lo que la gente pedía y la paralización por la empresa de la prestación del servicio, de cuatro o cinco días adicionales a lo que la gente intuía al no ver a los vigilantes por la calle, sin que nadie hubiese tomado esa decisión por parte del Ayuntamiento. Cuando la empresa admitió que la paralización tenía que venir de su mano, se paralizó el servicio. Lamento mucho que haya gente que piense que el servicio estaba cercenado sin ser real o que en algún momento la empresa dejase a sus trabajadores en casa sin prestar el servicio. Los trabajadores no tienen culpa y lo quiero decir claramente».