División de opiniones en el Consejo Social: así se distribuyeron las posiciones sobre el Plan XCuenca

Aunque no hubo votación como tal, según los testimonios recapitulados por Voces de Cuenca hubo empate en los discursos entre miembros del organismo partidarios y detractores

El Consejo Social de la ciudad debatió en la tarde de este miércoles acerca del Proyecto XCuenca, la iniciativa del Ministerio de Transportes en colaboración con las administraciones regional, provincial y municipal que plantea la eliminación del tren convencional y el reforzamiento del transporte por carretera y Alta Velocidad.

En la sesión de este órgano consultivo donde están representados diversos sectores de la ciudad no se votaba el Plan como tal (así se encargó de aclararlo en una comparecencia previa ante los medios el alcalde, Darío Dolz), pero sí que se fijaron las posiciones de los diversos intervinientes al respecto. Al contrario de lo que sucedió en su momento con proyectos como el del Bosque de Acero, que congregó un mayoritario respaldo rozando la unanimidad, los discursos en esta ocasión evidenciaron una visible división de opiniones.

Voces de Cuenca ha hablado con varios participantes en la reunión, quienes han trasladado que, grosso modo, hubo once intervenciones de los consejeros a favor del proyecto, otras tantas en contra y cinco que no se inclinaron diáfanamente por una u otra postura. Una de las fuentes consultadas advierte de que a veces los pronunciamientos «no eran rotundos, aunque se pudiera percibir cierta preferencia», por lo que más que de un conteo exacto se puede hablar de una recopilación de posiciones, algunas muy matizadas y matizables.

Así, secundaron el proyecto con claridad las tres concejalas del PSOE (Esther Barrios, Asunción Moriana y Saray Portillo), el alcalde y los representantes de la Diputación, la Junta y la Subdelegación del Gobierno, es decir, Lorena Cantarero, María Ángeles Martínez y Juan Rodríguez Cantos. Favorables también se mostraron el gerente del Consorcio, Marino Teruel; el secretario general de CEOE-Cepyme, Ángel Mayordomo; el representante de UGT, José Azcoitia; y el exalcalde socialista José Manuel Martínez Cenzano.

En contra de los planes ministeriales y por la continuidad del tren convencional se expresaron Dámaso Matarranz (desde hoy ya concejal no adscrito), José Manuel Cañizares (PP), Cristina Fuentes (Cs) y María Ángeles García (Cuenca, En Marcha!, la unión de Podemos y Equo).

En la posición discrepante pueden encuadrarse asimismo Miguel Ángel Jiménez Monteserín (presidente de la Real Academia Conquense de Artes y Letras), José Javier Lajusticia (Ecologistas en Acción), María José Mesas (Comisiones Obreras) y Alfredo Monteagudo (Cámara de Comercio). También el exalcalde popular Manuel Ferreros. Sus homólogos Francisco Pulido y Ángel Mariscal no participaron, pero ya habían expresado públicamente su rechazo a XCuenca y lo que supone.

La presidenta del Colegio Oficial de Aparejadores, Arquitectos Técnicos e Ingenieros de Edificación, Laura Segarra, y el presidente del Colegio Oficial de Arquitectos, Juan José Ramón Vindel, se mostraron en sus parlamentos en contra de que se vinculara el plan al desmantelamiento del tren.

La neutralidad fue la actitud por la que optaron instituciones como la Junta de Cofradías, representada por su presidente, Jorge Sánchez Albendea; las asociaciones con discapacidad, que tuvieron a Óscar Sillas como rostro visible; y la Asociación de la Prensa de Cuenca, por la que acudió Aurora Duque.

En lo que respecta a la Federación de Asociación de Vecinos (Favecu) y su presidente, Luis Miguel González, la información trasladada a este periódico por uno de los presentes es que resaltó aspectos positivos del anuncio gubernamental como la integración urbana entre barrios, pero otros insisten en que, al igual que el vicerrector de la Universidad de Castilla-La Mancha, César Sánchez Meléndez, «dejó claro que no podía pronunciarse» a un lado u otro del debate.

La reunión de este órgano municipal se inició con la presentación del Proyecto X Cuenca por parte de la secretaria general de Transporte y Movilidad del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, María José Rallo, quien a puerta cerrada -no hubo declaraciones a los medios- insistió en los argumentos que el Ejecutivo de Pedro Sánchez lleva desgranando desde finales de noviembre: baja ocupación del tren y elevado costes de operativos, imposibilidad de adaptar la línea a mercancías y apuesta por los servicios de transporte por carretera y los AVANT para vertebrar la provincia.

Además, aseguró que desde su departamento se trabaja para que las líneas de Alta Velocidad españolas transporten mercancías de pequeño peso y tamaño, como la paquetería, rompiendo así con la exclusividad para viajeros que por cuestiones técnicas caracteriza a este tipo de corredores.

En condición de invitados intervinieron el vicepresidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro; y el presidente de la Diputación Provincial, Álvaro Martínez Chana. Tanto ellos como el propio alcalde, Darío Dolz, expusieron «las particularidades de este proyecto en lo que respecta a la mejora de la movilidad, a la posible implantación de vías verdes y rutas turísticas, y a las infraestructuras dotacionales futuras y el servicio de lanzaderas a la estación del AVE», según señala el Consistorio en nota de prensa.