De ilustrar el New Yorker al Museo de Arte Abstracto: un recorrido por la muestra de Saul Steinberg en Cuenca

Más de cien obras del artista se podrán visitar desde este jueves hasta el 19 de abril de 2026.

El Museo de Arte Abstracto Español en Cuenca acoge la primera retrospectiva completa del dibujante Saul Steinberg en el país desde este jueves hasta el 19 de abril de 2026. Es una versión reducida con más de cien obras de la muestra presentada previamente en la Fundación Juan March de Madrid, en Fundos Fórum Salamanca y en la Universidad del País Vasco en Bilbao.

La subdirectora del museo, Celina Quintas, ha destacado que se trata de una oportunidad «magnífica» para conocer al artista con sus obras y su «universo particular del mundo de la imagen». Señala que en la biblioteca particular de Fernando Zóbel se han encontrado publicaciones sobre Steinberg, con dedicatorias del año 1961, «algo que me hace pensar que también admiraba al mundo visual y la iconografía de este artista».

La muestra incluye dibujos, collages, pinturas, grabados, fotografías, libros de artista y revistas en los que Steinberg desarrolló una obra que se resiste a las clasificaciones simples. El dibujo del autor está relacionado al expresionismo abstracto americano y lo eligió como medio de expresión artística fundamental.

La exposición es una retrospectiva completa de Steinberg con una muestra itinerante gracias a una donación realizada a la Fundación Juan March por la Fundación Saul Steinberg de Nueva York, la cual se constituyó tras su muerte en 1999 para dar continuidad al legado del artista y a la investigación sobre su obra y su tiempo, según ha destacado la comisaria de la exposición Aida Capa.

La influencia del dibujo de Steinberg en la opinión pública del siglo XX

Aida Capa destaca que es un artista «menos conocido, pero realmente importante para la historia del arte del siglo XX». La comisaria de la exposición señala que Steinberg es un autor «complicado de definir». En palabras de Capa, rompe con todas las fronteras después de que se viera obligado a huir de su país, Rumanía, por el antisemitismo para estudiar arquitectura en Italia, donde las leyes de Mussolini también lo forzaron a huir de Europa a Estados Unidos.

«Lo que es una circunstancia realmente dura y compleja, lo acaba convirtiendo en una oportunidad vital», asegura Aida Capa. El proyecto de vida de Saul Steinberg era ser escritor, pero no se le daba bien la palabra, por lo que decidió «contar a través del dibujo, de la línea». Al llegar al país americano, establece una relación con el periódico The New Yorker, algo que lo ve como «una oportunidad para poder contar sus ideas y dar a conocer su arte, además de mover conciencias», cuenta la comisaria de la muestra.

Steinberg llega a América con ojos externos a cómo lo ven los ciudadanos estadounidenses, por lo que «cuenta una historia que nadie desde dentro puede contar», afirma Capa, que destaca que es «muy crítico con la sociedad americana, aunque admira muchas cosas de su cultura».

Tras pasar por el Museo de Arte Abstracto, la muestra viajará al Centro José Guerrero de Granada en mayo de 2026 y a la Fundación Juan March Palma en octubre del próximo año.