Este viernes, 6 de junio, tuvo lugar una nueva edición de la Conferencia de Presidentes Autonómicos a la que asistió el líder castellanomanchego, Emiliano García-Page. El líder regional asegura haber salido «enormemente decepcionado» de este encuentro del que, dice, no esperaba “ningún tipo de acuerdo formal, ninguna votación”, pero sí “al menos alguna conclusión, algún compromiso dialéctico”.
En este encuentro, Page acudió acompañado del vicepresidente primero de la Junta, José Luis Martínez Guijarro; el consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina; el titular de Fomento, Nacho Hernando; y el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor.
Tras la conferencia, Page afirmó tener “la sensación” de que “cualquier español que hubiera podido seguir de cerca” lo que ha pasado dentro de la reunión que, según ha asegurado, se ha desarrollado “con bastante respeto institucional y formal”, hubiera visto “que el país es un puzzle roto” con “muchas piezas averiadas”. Muestra de ello, según afirma García-Page es que “ni siquiera se ha revalidado” el compromiso alcanzado en la última Conferencia, celebrada el pasado mes de diciembre en Santander, de “presentar un calendario y una aproximación en tres meses”.
Por otro lado, el presidente castellanomanchego ha puesto de manifiesto que el país “está ahora mismo prisionero de un ambiente de frentismo verdaderamente asfixiante» que «hace estéril cualquier intento de alcanzar acuerdos». En este sentido, ha criticado que “desde el minuto uno no se nota la voluntad de conseguirlos”.
La financiación, una cuestión clave para Page
Uno de los aspectos con los que el presidente de Castilla-La Mancha se ha mostrado más descontento, ha sido no haber incluido la financiación autonómica como algo a tratar dentro de este encuentro. García-Page afirmaba categórico que no encontrar este punto como propuesta inicial el orden del día “después de once años de retraso”, “ya era un indicativo”. A su juicio, la financiación autonómica “no es, bajo ningún concepto, un punto más. Es la condición previa para que no se conviertan en estériles todas las conversaciones de todos los diálogos o todos los foros”.
A este respecto, el líder regional castellanomanchego ha reiterado que “la riqueza es nacional, no es de ningún territorio», lo que ha sentenciado al afirmar que “no somos propietarios de la riqueza de un territorio que, además, depende del conjunto». Para Page el conjunto de país a todos los efectos es «un solo espacio, un solo mercado, y un solo circuito”. Por ello el presidente de Castilla-La Mancha ha insistido en que “tiene que pagar más el que más tiene” y quien no se puede “ni siquiera permitir el lujo de especular con romper la igualdad entre todos los españoles en términos de unidad económica”, es la izquierda.
Referente a la financiación singular, Page opina que “los independentistas no quieren tener más que ahora, quieren más que los demás”. El líder castellanomanchego ha recordado que “cuando aquí el Partido Popular en el 2012, en las elecciones catalanas, planteó que buscarían un sistema singular, quien más duro contestó fue el PSC y también el PSOE». Page afirma que, tanto el PSOE como el PSC, «dijeron que esa sería la mayor ruptura a la unidad y la igualdad en España, y yo digo exactamente lo mismo”, ha defendido.
Los municipios y las autonomías, trinchera de la tensión nacional
En otro orden de asunto, Page ha apuntado que la legislatura comenzó «con unas altísimas dosis de inviabilidad”, tras lo que ha recordado que las últimas elecciones generales “se celebraron al mes de la hecatombe autonómica para el Partido Socialista”, algo que, sostiene, “no puede volver a pasar”.
El líder castellanomanchego ha sentenciado que «ni los alcaldes, ni los ayuntamientos ni las autonomías podemos ser la trinchera en la que se desahogue la tensión social en España”, por lo que ha resuelto que antes de convocarse los comicios municipales y autonómicos «debe producirse el veredicto de la sociedad española sobre la política nacional”.
Una política de vivienda que recae en las comunidades autónomas
El presidente García-Page se ha referido también a la vivienda, uno de los puntos prioritarios del orden del día de esta Conferencia, y ha criticado “una distribución de los gastos de la vivienda que se multiplican para las autonomías en seis veces”. Según sus propias palabras, el decir que se va a poner más dinero, pero exigir más de lo que ya se exige a las comunidades autónomas, «es la política de yo invito y tú pagas” y resulta “muy triste” que se esté “jugando al tacticismo político” con temas que resultan importantes para el país, ha concluido.
