Castilla-La Mancha, una de las autonomías que más rápido paga a sus proveedores

La Consejería de Hacienda señala que esta política de pagos "favorece la actividad empresarial, el crecimiento económico y el empleo en la región"

Los datos del Ministerio de Hacienda sitúan a Castilla-La Mancha entre las comunidades autónomas del país que más rápido pagan a sus proveedores al cierre del mes de mayo de este año. La región ha abonado sus facturas a proveedores en una media de 16 días, nueve por debajo de la media nacional, que en mayo se ha situado en 25 días. De este modo, sigue la tendencia del Periodo Medio de Pago a Proveedores (PMPP) por debajo del conjunto de España.

Desde la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital se ha señalado que estos indicadores «son consecuencia de la buena gestión financiera y de tesorería del Gobierno de Castilla-La Mancha». La Consejería ha destacado del mismo modo que el Periodo Medio de Pago a Proveedores de la Administración Central se ha situado en 25 días en mayo de este año, nueve días por encima de los datos con los que ha cerrado Castilla-La Mancha.

Al cierre del ejercicio 2024, el Periodo Medio de Pago a Proveedores de Castilla-La Mancha se situó en 22 días, situándose nueve por debajo de la media nacional. Estos datos, según señalan desde la entidad de Hacienda regional posicionan a Castilla-La Mancha entre las seis comunidades autónomas de régimen común que más rápido paga a sus proveedores y abonando sus facturas por debajo del conjunto de España. 

Ambos datos, tanto los del pasado mes de mayo como los de cierre de 2024, muestran según refieren desde la Junta «como el Gobierno regional sigue cumpliendo con el límite legal de pago, establecido para las administraciones públicas en 30 días, y mejorando esos indicadores». Estas cifras, señalan, refuerzan «el compromiso del Ejecutivo autonómico con el tejido empresarial, garantizando un flujo de pagos más ágil y eficiente». La «agilidad» de los pagos que refieren desde el Gobierno regional «favorece la actividad empresarial, el crecimiento económico y el empleo en la región», concluían desde la Consejería de Hacienda.