El presidente de Castilla-la Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado que el Gobierno regional «ya no va a pedir que la ciudadanía vaya a vacunarse» sino que “vamos a llevar nosotros a partir de los próximos días unidades móviles en universidades y grandes sitios de afluencia de público como centros comerciales para aquel que no haya tenido tiempo de vacunarse o facilitarle al que tiene que revacunarse o ponerse una segunda dosis”.
Page ha calificado esta estrategia como parte de un objetivo «minucioso de excelencia» y una muestra del ritmo y la cobertura de inoculación de sueros contra la COVID-19 que se ha alcanzado en la comunidad autónoma.
El presidente castellanomanchego hacía este anuncio esta mañana desde Alcázar de San Juan (Ciudad Real) en el marco de la inauguración del Centro externo de Diálisis que presta servicio al área sanitaria que acoge la localidad y que va más allá del centro de influencia de la comarca.
La vacunación en centros comerciales y grandes empresas comenzó ya a aplicarse en otras comunidades a finales de primavera y principios de verano. En Madrid desde el 1 de julio se habilitaron puntos en lugares como El Corte Inglés y el Banco Santander, por ejemplo. En Cataluña también se han habilitado puntos sin cita en este tipo de recintos.