La construcción o no del almacén temporal centralizado de residuos nucleares (ATC) en Villar de Cañas es uno de los asuntos sobre los que deberá tomar una decisión el nuevo gobierno que se forme tras el 23J.
Si bien ninguno de los cuatro principales partidos que presentan candidatura en estas Elecciones Generales, PSOE, PP, VOX y Sumar, lo citan expresamente en sus programas electorales, sí que indican si están a favor o en contra de la energía nuclear.
El PSOE de Pedro Sánchez se compromete a aprobar el 7º Plan General de Residuos Radiactivos, que contempla que la gestión de residuos radiactivos se haga en siete almacenes temporales descentralizados en los emplazamientos de las siete centrales nucleares que los generan, hasta que se construya un Almacenamiento Geológico Profundo donde serán depositados.
El programa socialista por tanto deja atrás el 6º Plan General de Residuos Radiactivos, aprobado en junio del año 2006, y cuya solución para el almacenamiento temporal de los recursos utilizados era la construcción de un ATC en un emplazamiento por determinar; y cuyo destino sería Villar de Cañas según la decisión tomada en diciembre el año 2011 en el segundo Consejo de Ministros del gobierno de Mariano Rajoy.
En cuanto al programa que ha presentado el popular Alberto Núñez Feijóo se aboga por llegar a “un mix energético equilibrado y una energía barata para los consumidores y nuestras empresas”. Eso se traduce, en parte, en que una de sus 365 medidas apuesta por “extender la vida útil de las centrales nucleares existentes en nuestro país”. Eso sí, deja claro que será “con el visto bueno del Consejo de Seguridad Nuclear” y “en el marco de la normativa europea”.
VOX ha presentado para estas elecciones del 23J ‘Un programa para lo que importa’. La formación presidida por Santiago Abascal tiene una estrategia energética que pasa por potenciar las nucleares. De hecho, incluso propone en su programa implantar mini reactores nucleares en las centrales cerradas y promueve la extensión de la vía útil de las centrales nucleares existentes.
Por parte de Sumar la propuesta es caminar hacia un cierre nuclear “seguro y socialmente justo”. La formación de Yolanda Díaz se compromete “a mantener el calendario de cierre del parque nuclear español aplicando una moratoria a cualquier nueva iniciativa nuclear, exigiendo revisiones e inversiones para garantizar la seguridad del proceso y subrayando la responsabilidad de los propietarios”. Mientras, proponen “sacar la energía nuclear del mercado marginalista por su efecto distorsionante, incrementar la tasa de residuos radiactivos y asegurar un proceso de transición justa de los trabajadores vinculados al sector”.